Que la despedida de Mocker’s sea una excusa para volver a juntaros más adelante

Liher Granados

Siempre he pensado que no he tenido la suerte de disfrutar en directo de muchas de mis bandas preferidas porque se me han adelantado en el tiempo. ¡Pero con Mocker’s no! Me lo han puesto muy fácil para seguirles hasta este punto de inflexión en su trayectoria que supondrá el concierto que han preparado para este sábado en el gaztetxe de Zaldibar.

Sería el año 2010 cuando les conocí en el local de ensayo y ya entonces sorprendían por lo (aún más) jóvenes que eran, por su querencia desde el rock más bluesero tradicional hasta lo más contemporáneo, pasando por las referencias psicodélicas de los años 70. Lo mejor es que han tenido el arrojo y calidad necesarios para plasmar todas esas referencias en su propia propuesta, evolucionando de una manera natural, consecuente y autogestionada aquello que empezó recordando tanto a bandas nórdicas como autóctonas y que culmina liberado de toda crisálida en Argi egin, su último trabajo grabado.

A estas alturas no creo que vaya a descubrírselos a nadie musicalmente: ahí están todas las reseñas y reconocimientos que han recibido para quien quiera repasarlos. He sido testigo de cómo han sido capaces de ganarse el respeto de cualquier persona aficionada al rock por donde han pasado. Y qué suerte he tenido de poder acompañarles con Domingo al volante de la furgo, Jesus detrás de la cámara, Zana en la mesa de sonido y los demás amigos que les hemos seguido allí donde hemos podido.

Estoy seguro de que la fiesta pre-hibernación del sábado en Zaldibar será para enmarcar: además de con lo que pueda sorprendernos Mocker’s, no habrá que perderse a Riff Truckers, que son un seguro para cualquier festi, ni tampoco a Dube, joven y potentísima banda de Durangaldea, a quienes os animo a seguir si todavía no conocéis.

Que sea una excusa para volver a juntaros más adelante.

Eskerrik asko Ritxi, Gartzi eta Asier.

Mock’n’rolla!!!