Los eucaliptus y el salchichón
Rafael Hidalgo
Hay empresas, incluso sectores enteros, que piensan que la innovación es el único camino hacia la supervivencia y por el contrario existen otras, como la del sector de «forestalistas» de Vizcaya que no la hacen suya, como supone la de introducir el eucalipto en la provincia como sustitutivo del decadente pino insignis. Sin embargo, se supone que bien «aconsejados», han puesto en marcha para la introducción de esa especie la conocida táctica del salchichón, ya saben, ir haciéndose con él loncha a loncha en lugar de presentar una única batalla por su posesión.
A la chita callando, veamos la evolución de estas plantaciones. En los últimos 14 años la superficie dedicada a este tipo de árbol pirómano y de sed perpetua, ha aumentado un 51% en Vizcaya y los metros cúbicos existentes de esta madera, si en Álava suponen un índice de 1, en Guipúzcoa es de 2,5 en tanto que en Vizcaya es de 24, lo que pone bien a las claras el distinto tratamiento que se da a ese tipo de plantaciones en las tres provincias. De ahí que manifieste que como quien lava, el eucalipto se va haciendo un hueco de manera solapada, es de suponer que con las bendiciones de la Diputación Foral de Vizcaya que siempre ha tenido a este sector en alta estima.