Esta es mi fotografía de Kanbo
Iñaki Anasagasti
· Iñaki Anasagasti es un escritor ex senador del PNV
Hay una generación en este país que hace política y política sindical con las vísceras y que para colmo no tiene ni idea de lo que ocurrió en Euzkadi, sí, en Euzkadi a la que llaman ahora Euskalherria por puro antisabinianisno. Hay que matar al padre, pero lo hacen y siguen siendo adolescentes. Consideran que hay que asociar la localidad de Kanbo con el fin de ETA y ahí se resume todo.
Van por el mundo de listos y diciendo lo primero que se les viene a la cabeza sin ver más allá de sus narices .Una de estas incultas personas es nada menos que la secretaria del sindicato LAB, Garbiñe Aranburu, que en la soflama sectaria de este sindicato el martes primero de mayo dijo que el PNV estaba más cerca de Madrid y del PP que de Kanbo.
Aclaremos las cosas.
El PNV no votó la Investidura de Rajoy, no aprobó la ley mordaza y menos la reforma laboral, luego a no sé a qué viene esta acusación. Seguramente se basará en no votar las enmiendas a la totalidad a los presupuestos generales del estado pero si se logra encauzar la situación catalana y se da un pequeño paso, para dar grandes pasos, en relación con las pensiones habremos hecho más por los trabajadores que LAB y su secretaria general. Obras son amores y no buenas razones. Palabrería barata y ofensiva frente a resultados prácticos que deberían avergonzar a los del todo y la nada, salvo cuando les afecta a ellos.
Y en relación con Kanbo soy de los que opinan que ETA se debería haber disuelto al día siguiente de la muerte de Franco, pero continuó sacando pecho, diciendo grandezas, hablando del conflicto, y matando gente. Sesenta años después quieren blanquear ese inmenso fracaso por lo que considero que habiéndose dado cuenta del mismo en octubre de 2011, debieron decir en aquel comunicado encapuchado que cesaban definitivamente la lucha armada y se disolvían. No lo hicieron y nos han mantenido en un dudoso streptease con sus comunicados publicados como la gran cosa en Gara, impidiendo abordar el acercamiento de los presos, la transferencia de prisiones, una convivencia normalizada y muchas cosas más.
La secretaria general de Lab no puede desconocer que su sindicato ha sido uno de los sostenes de la lucha armada durante décadas, luego algo de responsabilidad tienen en la tragedia de este país, por lo que debería medir en algo más sus palabras y no acusando a los demás con tanta ligereza haciendo gala de un superabertzalismo que clama al cielo cuando ETA ha sido lo menos abertzale que ha hecho un sector de este pueblo durante sesenta años por lo que ,obligatoriamente es como para hacérselo mirar.
Y digo lo de la foto y la historia porque la palabra Kanbo la he escuchado en casa desde que nací. Y Garbiñe Aranburu se ha enterado que existe Kanbo estos días y seguramente no ha ido nunca a esta bellísima localidad de Iparralde. La familia de mi aita, tras la caída de Bilbao el 19 de junio de 1937 tuvo que refugiarse en Centelles (Catalunya) en aquella riada que organizó el Gobierno Vasco para evitar la masacre de la represión militar cuando entraron como invasores. Y, cuando cayó Catalunya se refugiaron en Kanbo donde vivieron dos años. Sí, en Kanbo. Como ocurre ahora con los exilios políticos. Y por abertzales. Y de allí volvieron a Bilbao dejando en el camino a mi aita que, condenado a muerte, se tuvo que ir a Venezuela y a mis tíos José Mari e Imanol que creyendo no les pasaría nada dieron con sus huesos en batallones de trabajadores, los campos de concentración del régimen. La de mi aita y también la de mi ama, fueron unas de las muchísimas familias abertzales reprimidas, perseguidas, robadas por la dictadura y de las que tuvieron que vivir precariamente ante la represión de un régimen de oprobio que perseguía ideas y conductas con el agravante de haber enviado nada menos que cinco chavales a Inglaterra y Bélgica como “niños de la guerra”.
Que venga ahora esta señora Aranburu a decirnos que nos cae lejos Kanbo es como para inhabilitarla por grosera e inculta.
Por tanto, mi fotografía de Kanbo es ésta y no la de la Sra. secretaria de LAB cuyo silencio ante los atentados de ETA durante años propició que aquella locura funcionara