A la hermana de mi abuela y resto de personas asesinadas aún desaparecidas en el bombardeo contra Durango
Manu Muñoz Minchero
· Hijo de la superviviente del bombardeo fascista contra Durango Teresa Muñoz y nieto de Manuel Muñoz Moreno, miliciano del batallón comunista Karl Liebknecht asesinado en Elorrio
Escribo estas líneas para recordar a la hermana de mi abuela, a Teresa Minchero Rubio. Gracias a su sacrificio estamos mi madre y mi familia vivos.
Ella protegió a mi madre, Teresa Muñoz Minchero, que era un bebé con su cuerpo y murió acribillada por un avión italiano fascista en Durango el 31 de marzo de 1937.
No tenemos que olvidarnos de todas esas víctimas que perdieron lo más preciado que tenían: su vida por un mundo mejor.
Olvidarlas sería volver a matarlas otra vez. Si su luz se vuelve a apagar solo nos quedará la oscuridad y el vacío.
No podemos olvidar a personas como a la hermana de mi abuela, Teresa Minchero Rubio. Si su recuerdo permanece es como si estuvieran a nuestro lado. De ese modo, su sacrificio habrá servido para que este mundo sea más solidario y menos egoísta.
Yo no os olvidaré nunca y siempre os estaré agradecido por vuestro sacrificio.