Kmon, diez años de un sueño
«Si esto sigue siendo así dentro de diez años más, nos sentaremos a celebrarlo, abriremos una botella de buen vino y cantaremos “veinte años no es nada”. Mientras tanto, les damos la bienvenida a esta sala donde cabe toda la imaginación del universo, apaguen sus móviles y disfruten. Esta función no ha hecho más que comenzar».