El presidente de la patronal española, la CEOE, manifestó recientemente a la pregunta de un periodista que «defiende los indultos a los políticos catalanes si ello contribuye a que se normalice la situación de Cataluña, pues bienvenidos sean».
Pero alguien o algunos le habrán tirado de las orejas hasta el punto de que se siente obligado a «matizar» (dichosas matizaciones que vienen a decir justamente lo contrario de su propuesta inicial) contestando a la pregunta de que «si entiende que los indultos podrían contribuir a la normalización política en Cataluña», con un «que no le corresponde contestar a esa pregunta porque soy presidente de la CEOE y no un político».
Pues eso. Acabáramos de parir.