¿El Guernica a Gernika sí, pero el Mikeldi a Durango no?
Editorial Mugalari Kultura
Partamos de una realidad: Tanto el PNV como EH Bildu solicitan una y otra vez al Reino de España que el cuadro Guernica viaje y se exhiba en Gernika. Esto es así, a pesar de que la obra de Picasso ni se hizo pensando en la villa vizcaina ni ha estado nunca en el municipio ni tendría por qué hacerlo, a pesar, eso sí, de que en ocasiones ha sido trasladado a otros destinos. Como medio que trabaja y difunde la cultura, nos gustaría que se cumpliera el sueño y grito Guernica Gernikara.
Partamos de otra realidad: La Diputación Foral de Bizkaia exhibe el histórico ídolo de Mikeldi durangués en el Museo Vasco de Bilbao. El monumento es uno de los iconos ancestrales vascos, un tótem vizcaino. Tanto EH Bildu como (por lo bajini) el PNV así como Herriaren Eskubidea, PSE-EE y PP de Durango solicitan una y otra vez de forma oficial al Museo vasco que el Mikeldi retorne a su origen, de donde partió décadas atrás.
También, tomen nota, lo hizo la empresa dueña del supuesto becerro como ha demostrado este periódico digital con el siguiente documento, cuando la entonces directora del museo mintió al argumentar que «el Mikeldi no ha sido reclamado por sus propietarios». Sí lo hizo: el 23 de septiembre de 1969 «con los fines que la Corporación (de Durango) estime convenientes», tal y como quedó firmado por el portavoz de Mikeldi S.A.
A diferencia del cuadro Guernica en Gernika, el Mikeldi sí ha estado ya en Durango, municipio en el que fue hallado y en él debiera estar según la decisión consensuada por el Ayuntamiento de la localidad; también lo ha reclamado el área de Turismo municipal y una parte amplia de la ciudadanía de la villa que reivindica su redención. Incluso, recordemos, se ha señalado que estaría bien protegido en Kurutzesantu Museoa, junto a otra joya vasca y patrimonio de Durango como es la Cruz de Kurutziaga, catalogada como la mejor del Estado de su época.
A partir de ahí, el desaguisado. Las paradojas. Las incoherencias. El puzzle que no encaja. Durango cuenta con una copia del ídolo de Mikeldi ubicada en las inmediaciones de donde se encontró y con ello se debe contentar. Como Gernika debe resignarse con un mosaico que reza una vez más Guernica Gernikara.
Y tras estas dos realidades, una pregunta: ¿Por qué quien suspira y se deja la piel por el Guernica a Gernika (sin haber razones que obliguen a su traslado) no mueve ficha y sí posibilita el Mikeldi a Durango (que tiene toda lógica para hacerlo)? Es decir: ¿El Guernica a Gernika sí, pero el Mikeldi a Durango no?
Y lo peor. Al tiempo. Veremos antes el Guernica en Gernika, por pactos e intercambio de cromos políticos, que el Mikeldi en Durango. Incluso antes el Guernica en Durango que el Mikeldi. Ojalá erremos.