Osasuna eliminó al Athletic el día que en 1937 los golpistas fusilaron a Cilveti, fundador del club navarro
IBAN GORRITI
Osasuna eliminó el pasado jueves día 16 de enero al Athletic de la Copa del Rey en octavos de final con un marcador de 2 – 3. Ese mismo día de 1937, casualmente, uno de los cofundadores del club futbolista navarro fue fusilado en Etxauri a los jóvenes 38 años por los a la postre franquistas: Eladio de Cilbeti Azparren. Nacido en Iruñea en 1898 fue precisamente una de las personas que propusieron el nombre de Osasuna y desde 2017 da denominación a un vial ubicado junto al estadio del club, iniciativa impulsada por la plataforma Sadar Bizirik.
Por todo ello, su nombre siempre está presente de un modo u otro, aunque para la mayoría de la sociedad vasca aún no sea conocido. Firmaba como Eladio de Cilveti y fue un político y deportista navarro, miembro del partido abertzale EAE-ANV y cofundador del Club Atlético Osasuna en 1920. Con anterioridad, la capital navarra había albergado otros proyectos balompédicos que no perduraron en el tiempo. Es el caso de la Sportiva Football Club, donde jugó de portero, y que sufrió una escisión debido a diferencias ideológicas. Sus integrantes fundaron entonces un nuevo club llamado Osasuna, palabra en euskara con acepciones como “salud, fuerza o vigor”. En el primer reglamento de la entidad, y a fin de evitar nuevas discrepancias, dejaron claro el carácter apolítico del nuevo club, al que declararon “extraño a toda idea política y religiosa”. Aun así, eran tachados -por los carlistas integristas y su prensa- de club “de los napartarras”, como se les conocía a los nacionalistas vascos.
DE PNV A ANV
Una de las personas que propuso el nombre –según se estima, aunque no queda del todo claro según las personas que más han estudiado su figura- fue Cilveti, quien militaba en el PNV entonces y tiempo después lo haría en ANV y era ferviente defensor del euskara. En cada acto relacionado con su lengua materna ahí estaba presente. Entre otros, era amigo de Arturo Campión, cofundador de Euskaltzaindia. Las ideas de Eladio le llevaron a ser enemigo de los golpistas y ejecutado por aquellos fascistas españoles el 16 de enero de 1937. Fue concretamente el 16 de septiembre de 2017, cuando el ayuntamiento de Iruñea, en el marco de la programación del Día de la Afición Osasunista, le dedicó la calle citada y un homenaje junto al campo de fútbol de El Sadar, estadio con actuales 23.500 localidades.
Eladio de Cilveti – apellido toponímico de municipio navarro- fue el mayor de seis hermanos y estuvo casado con Joaquina Sánchez Cayuela. Residieron en la calle Comedias. El padre de este publicista de profesión, Bartolomé, era de Auritz, y su madre, María, natural de Bizkarreta. Trabajó en la aseguradora Plus Ultra y más tarde fundó la agencia Tirren. Comenzó a participar muy joven en actividades deportivas, culturales y políticas de la histórica ciudad. Cuentan que con solo 15 años era secretario del Iruña Football Club. En 1920 participó en la fundación del club de fútbol Osasuna, proponiendo ese nombre y ya en 1933 se incorporó a EAE-ANV.
ASESINADO EL 16 DE ENERO DE 1937
Según el Patrimonio Documental de la Memoria Histórica de Navarra, fue detenido por los sublevados contra la legítima Segunda República el 21 de diciembre de 1936 y asesinado en un rincón del camino de la zona de Etxauri el 16 de enero de 1937 tras sacarlo del fuerte de San Cristóbal en Ezkaba. Tenía 38 años. La excusa del fusilamiento fue estar “en contra del Movimiento”, argumentaron los contrarios a la democracia. “A Cilveti lo fusilaron por su militancia política porque no había participado en ningún tipo de acción”, valora el historiador santurtziarra Eduardo Renobales a DEIA, quien pone en valor que Osasuna sea “el único grande de Euskal Herria que tiene nombre en euskara”.
En pleno centenario de los rojos, en 2020, y gracias al trabajo del colectivo Osasuna Memoria, salió a la luz la represión sufrida por el club tras el golpe de Estado del 1936 con más de diez asesinatos por su militancia de izquierdas y vasquistas de fundadores, futbolistas y directivos de la entidad. Fue entonces cuando Osasuna Memoria y el Gobierno de Navarra homenajearon a sus familiares, sin embargo, “el club no se implica en la reparación de las víctimas, la justicia, y verdad. No reconoce su historia”, valoran fuentes consultadas en Iruñea por este diario.