El zornotzarra Morgaetxebarria y el mallabitarra Elordi hacen las delicias en aquel «frontón más largo del mundo»

IBAN GORRITI

A reventar. Ayer, el histórico Ezkurdi Jai Alai de Durango se abarrotó en una cita manomanista en la que se apreciaba entre el público llegado de Durangaldea así como de Gipuzkoa -algún navarro también se acercó al municipio- la llegada de días de festejos con motivo de la llegada de fin de año. En la barra de bar se vendió «todo y eso que hemos tenido que ir a reponer», confirmaban positivos a este medio. El número ganador de la rifa del club local fue el 2.773.

El mallabitarra Aitor Elordi estuvo ‘estelar’. IBAN GORRITI

El querido mallabitarra Aitor Elordi y Zabaleta ganaron como una apisonadora a Jaka e Imaz en Durango (13-22)  y sumaron su cuarto punto del Campeonato de Parejas. Se han consolidado como una pareja muy poderosa a pesar de aquella primera derrota.

Morgaetxebarria, de Amorebieta-Etxano, ayer en Durango. IBAN GORRITI

En el partido del Campeonato de Serie B, el zornotzarra Morgaetxebarria -seguido por la cámara de MUGA durante su partido- levantó los brazos y gritó gloria al ganar su encuentro junto a Zubizarreta, ante De la Fuente y Eskuza. Como curiosidad, el cartel reunía a un pelotari de cada herrialde de Hegoaldea.  Con todo, magnífica tarde en la villa para los manistas de Durangaldea y para la comunidad pelotazale que apostó por disfrutar de la velada. A mediodía ya se habían vendido todas los tickets en entradasfronton.com. En taquilla, se pusieron a la venta entradas para poder seguir el espectáculo deportivo de pie en un frío frontón.

Club de pelota Durango comandado por el ayer juez, Txaber Zabala. EKHI GORRITI

Los mayores evocaban con cierto orgullo que «Durango contó décadas atrás con el frontón más largo del mundo»,  un dato que este diario no ha podido confirmar. «Había otro en México que quizás le superaba», confrontaba ayer en el Ezkurdi Jai Alai, José Miguel, vecino de la villa. El municipio recuperó años atrás unos metros de su memoria geográfica, deportiva e histórica. Se sacó a la luz y pintado las dos últimas líneas del antiguo frontón de la localidad que se conservan a la intemperie y que eran el número 17 y 18.

Y es que la cancha medía 72 metros de largo, 63,50 con losa y 8,50 con arena. Ofrecía a los amantes de la pelota un total de 18 rayas. Cada una de ellas se distanciaba de la siguiente en cuatro metros. La construcción de las instalaciones de Ezkurdi comenzó en 1785 y terminó en 1788, según los datos municipales.

En este edificio ya desaparecido, se realizaron obras de reparación en 1881, pero sería bombardeado en septiembre de 1936. Más adelante se derribó con el objetivo de construir el Jai Alai que conocemos hoy en día. Fue inaugurado en 1955 -en el inminente año se cumplirán siete décadas de esta efeméride-, un año después del cierre del frontón antiguo.

Como recuerdo viviente de aquel capítulo de la historia, se pintaron dos líneas de una pared que todavía guarda impactos de metralla de los bombardeos de Durango durante la Guerra Civil, y que formó parte del frontón. Asimismo, se colocó en esta pared una placa conmemorativa en 2005 coincidiendo con el 50 aniversario del nuevo Ezkurdi Jai Alai. Esta señal cumplirá en unos meses 20 años.

MEDIDAS DEL FRONTÓN PRIMIGENIO DE DURANGO

Gracias al investigador durangarra José Ángel Orobio-Urrutia, podemos publicar hoy en este periódico un dibujo que editó Francisco Javier de Sagastizabal en su libro Apuntes durangueses sobre el nuevo juego de pelota, de la colección Kurutziaga, nº 22 , así como un par de fotos de los años 30 en que se ve el frontón en toda su longitud. Esta infraestructura deportiva llegaba desde la calle Herriko Gudarien hasta el edificio que hace esquina entre Zumalakarregi y Ezkurdi.