Más compromiso e implicación con la memoria histórica es lo que reclamaron ayer los convocantes del homenaje a los gudaris, milicianos y mujeres que defendieron las libertades y los derechos de Euskadi en la guerra del 36 y que anualmente se celebra en el monumento Aterpe 1936-1939, acto en el que estuvieron presentes el gudari José Moreno del batallón San Andrés y el miliciano Alejandro del Amo del Batallón Meabe. El primero, de 99 años, quiso hablar en el acto como lo ha hecho en años anteriores y logró hacerlo, aunque no le fue fácil conseguirlo.

En primera fila el miliciano Alejandro del Amo y el gudari José Moreno; detrás Jose María Pastor, niño de la guerra. PHOTO. Iban Gorriti

«Lo que demandamos es un derecho que nos asiste, no un capricho. Recuperar nuestra memoria es la mejor forma de asentar la democracia. Simplemente reclamamos lo que se nos debe como personas: verdad, justicia, reparación y reconocimiento y restitución de la dignidad y el honor de las personas represaliadas y asesinadas», manifestaron y por ello exigieron «la implicación de las instituciones, porque son ellas las garantes de los derechos y libertades de la ciudadanía y porque nuestra reivindicación no deja de ser la base sobre las que deben sustentarse la libertad y la democracia, valores estos por los que aquellos hombres y mujeres que hoy homenajeamos en esta escultura, Aterpe 1936, entregaron sus vidas».

PHOTO · Thais Martin