La pensión de mi vecina
Óscar Gómez Mera
Tengo una vecina pensionista. Este año con el 0,25% de subida su pensión se vio incrementada en 2,10 euros. La pobre mujer apenas fue a la escuela. Cuando se ha enterado de que este año al final la subida será del 1,6% me ha pedido que le calculara a cuánto asciende el incremento. Los 2,10 euros pasarán a ser 13,44. Unos 11 euros más.
Mi vecina, que tuvo que cotizar 40 años para tener derecho a una pensión de poco más de 800 euros al mes, está toda eufórica con tan monumental incremento. Como todas sabemos, el dinero también trae preocupaciones. Mi pobre vecina se enfrenta ahora con un gran dilema. ¿A qué destinar esos 11,34 euros de subida? Baraja varias opciones.
La primera consiste en destinar los 11 euros de la primera mensualidad a comprarse en un bazar chino una bandera de España y colgarla en su pequeño balcón, mostrando así el orgullo de pertenecer a un país democrático, con un estado social y de derecho que garantiza a quien se deslomó toda su vida levantando dicho país y sufragando dicho estado una vejez digna.
Otra alternativa sería afiliarse al PNV costeando con el incremento de los 11 euros la cuota de afiliación a dicho partido. Partido que al fin y al cabo fue, con ese sentido de estado que le caracteriza, quien consiguió arrancar al gobierno del PP dicho incremento, logrando así que las pensionistas de la Comunidad Autónoma Vasca tengan unas pensiones de lo mejorcito.
Mi vecina también contempla destinar esos 11 euros mensuales a dar misas, rezando así por la salud y el buen hacer de toda la clase política que pone en marcha reformas de las pensiones, y dedicando infinidad de padres nuestros y ave marías a velar por las almas de los dirigentes de CCOO y UGT que con su firma o su silencio avalan esas reformas que garantizan a nuestros aitites y nuestras amamas unas pensiones de Champions League.
Como la generosidad de mi vecina no conoce límites, otra posibilidad sería donar esa cantidad cada mes a una ONG, colaborando así con el buen hacer de las mismas. Tiene varias en mente: Banqueros sin Fronteras y sin Escrúpulos (valga la redundancia), Autopistas Huérfanas y Desamparadas, Gürtel Internacional, EREs Unidos de Andalucía o Fundación Señor X de los GAL.
Al final mi vecina se lo ha pensado mejor y va a ir guardando esos 11 euros cada mes. Al finalizar el año, con la paga extra de diciembre (si es que no la recortan) y algo que ella ya tiene ahorrado dice que se va a comprar una escopeta de caza del calibre 12 con posta lobera. No entiendo muy bien para qué.