600 personas participarán en la comida de la fiesta inclusiva ‘Arroces del Mundo’ el sábado en Jesuitak
Mugalari
Durango celebrará la novena edición de la actividad Arroces del Mundo el sábado en las instalaciones del colegio San José Jesuitak a partir de las 12.00 horas. La fiesta que se desarrolla en diez lugares de Euskal Herria está organizada por el denominado Taller Participativo Zubiguneak, formado por asociaciones autóctonas y otras de personas inmigrantes, así como de hombres y mujeres a nivel individual. Un total de 600 comensales saborearán la jornada.
Imagen del año pasado. PHOTO · Julián Ríos
En colaboración con el Ayuntamiento de Durango y la asociación de comerciantes Dendak Bai, Zubiguneak invita «a participar, en este evento gastronómico de carácter festivo, intercultural y reivindicativo que tiene al arroz como elemento central».
Una actuación. · PHOTO · Julián Ríos
El evento que en un principio iba a llevarse a cabo en Ezkurdi -«pero dan lluvia»- tiene cuatro objetivos que la organización pasa a detallar de la siguiente manera:
- Reclamar, ocupar, recuperar nuestras calles. Frente a los problemas que cotidianamente vivimos en nuestros barrios, reclamamos las calles para el disfrute colectivo, desde propuestas imaginativas que fomenten la cultura popular – no la del escaparate- basadas en el fomento de la convivencia y el respeto a la diversidad.
- Nunca más un barrio sin nosotros y sin nosotras. Queremos participar. Los barrios son nuestros. Son de quienes los habitan cotidianamente, de quienes a través de su historia han peleado para su mejora, de quienes nacieron aquí y de quienes han llegado recientemente. Todos y todas queremos participar de su rehabilitación, en la mejora de las condiciones de vida sociales, urbanas, educativas… Porque es nuestra vida y el espacio que habitamos.
- Festejar la interculturalidad y el mestizaje. Proponemos vivir como una oportunidad la realidad interculturalidad de nuestros barrios. Apostamos por generar espacios de integración y de convivencia. Y lo hacemos también de modo festivo, porque, sin olvidarnos de problemas y reivindicaciones, sabemos que la fiesta nos une y nos posibilita visualizar espacios de convivencia normalizada, además de permitir aportar la diversidad de nuestras culturas en un proyecto común: el de una vida y unos barrios más humanos y habitables, solidarios y luchadores.
- Barrios hermanados. Nuestros barrios y nuestras preocupaciones no están aislados. Otros barrios y otros cascos “históricos” de muchas ciudades enfrentan problemas y viven realidades similares. Por ello los barrios de san Francisco en Bilbao, y Alde Zaharra y Zaramaga de Gasteiz, Otxarkoaga en Bilbao, Getxo, Gernika, Arrasate, Errenteria, Donostia y Durango estaremos conectados y hermanados en la misma iniciativa. Tal vez con ello se amplifiquen nuestras reivindicaciones, la fiesta y la alegría sean mayores y sintamos menos soledad en nuestras luchas.
