28J · ¿Sabías que este monolito cumple 15 años en Durango recordando a gays y lesbianas represaliados por el franquismo?
KULTURA DURANGO
Escasos días atrás fallecía el escultor de Alkitza Koldobika Jauregi a los 64 años tras no superar un infarto. Una de sus obras queda para la historia en Durango. Es el monolito en memoria a las personas represaliadas durante la Guerra Civil y el franquismo por su opción sexual. Hoy 28 de junio, Día Internacional del orgullo LGTBI+ está bien recordar estos dos detalles.
FOTO · MUGA
La escultura se colocó en 2009, es decir, se cumplen 15 años de cuando el bertsolari y escritor Jon Maia dejó escrito unas palabras en recuerdo de las personas «perseguidas y represaliadas por el régimen franquista debido a su opción sexual y afectiva y que lucharon bajo ese régimen por vivirla en libertad».
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La escultura -tal y como informa una entrada de Wikipedia que tiene este monolito en internet- se inauguró el sábado 16 de mayo de 2009, día anterior al Día internacional contra la homofobia y la transfobia, en su lugar definitivo, al lado de la sede actual (2011) de la Durangoko Azoka, en el pabellón multiusos Landako. Acudieron la consejera de empleo y asuntos sociales entonces, Gemma Zabaleta, y algunos concejales del PNV, PSE-EE y Aralar.
«LAS OTRAS VÍCTIMAS»
Imanol Álvarez recordó a los perseguidos por «el simple hecho de amar de forma distinta», afirmando que «hemos sido los grandes olvidados, las otras víctimas». La consejera de empleo y asuntos sociales recordó que en numerosos países la homosexualidad todavía está condenada a muerte.
Se trata de un monolito realizado en mármol de tonos grises oscuros con algunas vetas blancas. Consta de una planta rectangular, cuya parte superior está labrada con surcos irregulares, y en cuyo frontal se erige un «menhir» en el que sobresale una gran «G» invertida. Sobre la base rectangular, que tiene las esquinas del lateral izquierdo redondeadas, hay una roca más pequeña con una forma de «T» sobresaliente que prolonga el surco que llega hasta ella. En el lateral posterior del monumento hay una placa dorada en la que pueden leerse unos versos en euskera de Jon Maia.
