A Pablo Pascual, de corazón colosal, ejemplo de poner a la familia y a la amistad por delante de todo

El pueblo de Durango, y sobre todo la familia del baloncesto, se muestra consternada tras el fallecimiento el domingo de Pablo Pascual García, de tan solo 42 años por una enfermedad contra la que luchaba con admiración en los últimos tiempos. El joven casado con una agradable mujer y padre de un maravilloso niño de igual nombre era de lo más noble que hay en la villa. De corazón colosal y con la familia y la amistad por delante de todo, era de quienes nunca se cruzaba sin dejar de saludar, detenerse y compartir inmejorables palabras. Una educación de quilates.

En el centro de la imagen como entrenador del Tabirako. LUIS ITURRIOZ

Quienes le apreciamos tanto y hemos compartido recordados momentos deportivos o de ocio no le olvidaremos nunca. Fue -muy buen- jugador y entrenador de baloncesto del Tabirako y también militó en el Zaldua ST. También era un gran aficionado al pádel. Y, muy importante, trabajó por los derechos de personas desfavorecidas o desprotegidas. Sigues presente Pablo en Durango, en el barrio.

El funeral por su persona se oficiará esta tarde, a las 19.00 horas, en la parroquia de Santa Ana.