Malatestta presenta mañana domingo su recomendable ‘Persiguiendo sueños’ en The 80’s de Durango

Malatestta presenta mañana su recomendable primer disco titulado Persiguiendo sueños. El concierto de rock-pop con voz rota se llevará cabo en formato acústico de guitarra y teclado en el bar The 80’s -antiguo Misarbe- en Arriluzea Kalea, 15. El encuentro con el público dará comienzo a las 12.30 del mediodía. 

Germinado, Malatestta comienza a caminar por buena senda, por los surcos de su vinilo de presentación: ‘Persiguiendo sueños’. El alter ego de Mario Antolín (Santurtzi, 1975) cuenta con los ingredientes que diferencian a una persona en la música con una persona que es música. Abrazado al segundo matiz, el de Ezkerraldea aterriza con once canciones que tienen un hilo conductor básico: su hechicero rajo de voz.

Así, Malatestta transmite con cuerdas vocales arenosas de sello propio, acuña carisma personal y estético, y viaja con grandes letras –o llámenlas poesía si prefieren- que se descuelgan de sus bolsillos a cada paso. Extraña a día de hoy, que se vende tanto producto enlatado, que tus oídos se topen con autenticidad. Un ejemplo es su firma de canciones como New York, himno musical de borrachera nocturna en garito, así como uno de los viajes que dan vueltas y vueltas por esta recomendable cosecha de canciones.

Estos 45 minutos son un diario de bitácora no intimista, sino más bien personal. Mario no se escuda tras sus palabras, sale a defenderlas con guitarra acústica en mano y con los pies en el suelo, como su mente. Este es su proyecto más de puerta privada, aunque, eso sí, operado a corazón abierto, tras haber militado con la pasión que le caracteriza en La Venta de Borja, Lacco o Ekintza.

“Soñando un mundo mejor”, urde afables canciones que fluyen por parámetros sonoros entre el rock y el pop y meciendo en todo momento sobre un sedimento de rock and roll. Podía haber apostado por versiones indies para ser actualidad, pero Mario es honesto consigo mismo y si no lo sabe, su voz –años atrás no se atrevía a cantar- es su pasaporte a esos lugares que extraña aunque, como entona, no visitó. Londres también es delicia.

Abrigo sonoro

Y según van pidiendo paso unas y otras composiciones, van tejiendo el abrigo sonoro músicos que han pasado por Flying Rebollos, Doctor Deseo o Extremoduro, aunque Malatestta sigue sonando a las cuerdas vocales del santurtziarra.

Si hubiera que buscar alguna similitud, en Las tardes de domingo la guitarra evoca a Mark Knopfler y en la citada New York, una conexión vocal a The Pogues. ‘El cielo está en llamas’ podría tener por detrás la guitarra de Adolfo Cabrales. Pero son un grano de arena en toda una playa de rock and roll acústico.

‘Persiguiendo sueños’ cuenta con grandes canciones como es la pegadiza El cielo está en llamas, que verá la luz como primer single el viernes 26 de marzo. Abre la galleta láser, ‘Se caen los carteles’ con marca de agua de pop-rock urbano. Mario cambia de registro en ‘Leyenda’, con pegada pasea por otros universos que no son el de sus viajes.

Surfean gaviotas

Con ‘Mi color favorito’ aprietas dientes, agitas cabeza, y te dejas llevar por sus corrientes de aire limpio en el que surfean gaviotas. Sevilla es agradable y podría ser banda sonora de alguna serie de televisión.

El disco llega casi a su final con una canción solidaria en la que Malatestta y su hija Garazi comparten un mensaje positivo hacia aquellas niñas y niños con cáncer. ‘Palabras vacías’ pone el final con el mejor verso: “Me vengo tan arriba que me estorba el cielo”. Ahí comienza el universo de este músico que gracias al apoyo de amistades y a su tesón ha conseguido sonar a sí mismo: auténtico. Carismático.