Los jesuitas esperan una valoración del Ayuntamiento de Durango para la compra de su panteón ya vacío
La comunidad de los jesuitas de Durango está a la espera de una nueva valoración por parte del Ayuntamiento de Durango de su panteón del cementerio de Santikurutz.
Panteón de los jesuitas. PHOTO. I. Gorriti
Según ha podido saber este periódico, el Consistorio es el único que puede comprar el panteón de la orden ignaciana tras haber trasladado los restos de los 26 religiosos allí sepultados a Loiola. Se exhumaron el 16 de febrero de 2018, según detalla el jesuita Koldo Katxo. En aquel momento se dio vuelta a la losa para que no figuren el nombre de los sacerdotes y hermanos.
En la actualidad, el panteón ubicado junto a la capilla y anexo al de los sacerdotes diocesanos de la villa mantiene tan solo la inscripción Patres et Fratres. Societatis Jesu. JHS.
Inhumación de los restos que había en Durango en Loiola con leyenda en latín. PHOTO. Koldo Katxo
La Administración duranguesa hizo una primera valoración del panteón y en estos momentos se espera una segunda. En junio, como ya anunciaron, la comunidad jesuita de Durango de siete religiosos dejarán la villa e irán a otros destinos. De todos modos, la docencia continuará en el colegio San José Jesuitak y ahora estudian cómo mantener el servicio de acogida a personas migrantes de Kurutziaga kalea.
