MUSEO BELLAS ARTES DE BILBAO · ‘Vida en silencio: Zubiaurre Garden Scene’, por Anisia Serendipia

Anisia Serendipia

Exposición “Los Zubiaurre. Memoria gráfica”, en el Museo Bellas Artes de Bilbao hasta el 6 de octubre de 2019.

MIS OJOS, QUE CODICIAN COSAS BELLAS_ Roundhay Garden Scene, la escena del jardín de Roundhay es considerada la primera película muda y fue filmada por Louis Le Prince en 1888 en el jardín de la casa de sus suegros en Leeds. En ella varias personas caminaban por un jardín. La misma escena se repite después, al final de los años locos, en la «Casa jardín de Zubiaurre», primera proyección de una muestra que seguro les va a emocionar.  Por aquellos días, el músico de Durango Bartolomé de Erzilla compone el gallop Marchen que en 1889 dedica a Pilar Elejoste, una niña de la localidad que ese año cumple  4 años y que muchos años después contraerá matrimonio con el pintor oriundo de Garai Valentín de Zubiaurre (hijo del músico Valentín de Zubiaurre Uriona-barrenechea), nacido en 1879.

Imagen propiedad de Museo Bellas Artes de Bilbao.

_Los hermanos de Jacoba_”Valentín y Ramón de Zubiaurre… parece a primera vista que estos dos artistas son gemelos; luego, tras un análisis más atento y minucioso, descubrimos en ellos una como tendencia diferenciadora. Juzgando por los lienzos aquí expuestos, la dirección más acentuada de Ramón es el gusto por lo decorativo, mientras que Valentín propende al estudio plástico de las emociones. Ambos son pintores de «carácter». Ramón nos presenta tipos vigorosos, y los agrupa de modo que dejan en nosotros impresiones de fuerza, de exaltación ó apacible alegría. Gusta, además, de las armonías brillantes de color. Valentín se nos aparece singularmente como artista de visiones sombrías. Es quizá más pensador y analítico que su hermano; pero también menos gracioso,  menos comunicativo, menos propenso á sentir el arte como decoración”. Este fragmento lo firma en Madrid en 1915 Juan de la Encina. En junio de 1917, El Heraldo de Madrid relata una escena organizada por La Juventud de artistas innovadores y libres que se reúne en el Café de Pombo para celebrar un banquete con motivo de la presencia de Picasso en Madrid para asistir al estreno de su obra Parade. Picasso se muestra encantado de encontrar a tan apasionados amigos, entre ellos los hermanos Valentín y Ramón Zubiaurre, y Juan de la Encina, seudónimo de Ricardo Gutiérrez Abascal, un bilbaíno crítico de arte que será director del Museo de Arte Moderno de Madrid durante la Segunda República. Para entonces, en 1922, ya había contraído matrimonio con María del Pilar Jacoba Cristina Zubiaurre Aguirrezabal, hermana de los pintores muditos de Garay, como eran conocidos en el Durango de la época.

PHOTO · Anisia Serendipia

_En la casa se defienden de las estrellas_ Hacia  1898, año en el que nace el poeta y también músico Federico García Lorca, Pilar ingresa en el Conservatorio Nacional de Música y Declamación de Madrid, convirtiéndose en una talentosa pianista, según podemos leer en la monografía “Pilar de Zubiaurre. Evocaciones. Artículos y diario (1909-1958)”, obra de Iker González-Allende. Pilar, nacida en Garai el día de Santiago de 1884, trabaja mucho por fomentar  la carrera de sus hermanos sordos, como marchante y como comisaria de sus exposiciones, entrando así en contacto con el ambiente cultural del primer tercio del siglo XX en Madrid, conociendo a lo mejor de la intelectualidad del momento que participa en la tertulia de que los sábados se celebra en el estudio de sus hermanos.

Pilar será miembro del Lyceum Club Femenino fundado por María de Maeztu en 1926. Considerada como una de las primera asociaciones feminista del estado, será frecuentada por las “sinsombrero” antes de ser clausurada, y destruída la mayor parte de los archivos del centro, por la Falange en 1939. En el Lyceum participan dos generaciones de mujeres, la del 14 y la del 27, que luchan por hacerse un nombre en circunstancias muy adversas. Pilar trata entre otros ilustres a Federico García Lorca, quien le dedica los poemas “Tres ciudades”. Lorca también dedicará unas coplillas a María de Maeztu: El sombrerito de María, dice que es moda llevarlo así, pero, en ella, diríase que se le va a caer o que ya se le ha caído. Parece en alusión al  movimiento “sinsombrerista” que frecuentaba la asociación fundada por esta.

Pilar participará también en el proyecto de la Escuela Plurilingüe, conocida después como Escuela Internacional Española, un colegio en el que se enseñaban dos idiomas extranjeros a los niños y que seguía los postulados liberales de la Institución Libre de Enseñanza. Durante la Guerra Civil, el gobierno republicano nombra a Juan de la Encina vocal de la Junta de Incautación y Protección del Tesoro Artístico y en 1938, el presidente de la Segunda República acuerda la salida del país de varios intelectuales que habían sido invitados por el gobierno mexicano para formar parte de lo que se conocerá como El Colegio de México. Entre ellos Juan de la Encina.

_Me senté en un claro del tiempo. Era un remanso de silencio, de un blanco silencio_ Primera proyección en la sala, grabada en torno a 1929-1930, el dolce far niente de los Zubiaurre en el jardín de la casa. Valentín o Ramón nos cuenta una historia mediante el lenguaje de los signos, debe de ser Ramón por lo que dice Juan de la Encina de que Valentín es menos comunicativo. Pilar de Zubiaurre, con sus ondas de agua en el pelo, saltando la cerca con su hijo Polin Gutiérrez; ¿Isolina?, la mujer de Ramón (Garai, 1882), dando réplica a la mismísima Coco Chanel (sin el cigarrillo entre los dedos), juguetea con el niño. La madre, Paz Aguirrezabal, toma chocolate con el señor cura. Llegan las visitas, se espera ver aparecer poco menos que a Boy Capel con su camelia en el ojal de la solapa. Los moños charlestón, los peinados años 20, las chicas de los cloches blancos bailan junto a los elegantes y afamados dantzaris; después alardean los agiles y musculosos espatadanzaris de Garay...  Me he debido de quedar dormida porque he soñado que veía a Concha Méndez con su sombrero a medio caer en la romería. Cuenta Max Aub en sus diarios que Pilar de Zuleiauvre [sic] había sido amiga de Buñuel en su juventud, que le había conocido en San Sebastián cuando este era novio de la escritora (Concha Méndez) ¡es el final de los felices años veinte! Poco después vendrá la guerra y el exilio. Pilar, a México con su marido. Ramón marcha con su esposa Isolina Gallego a Chile. Concha Méndez, casada ya con Manuel Altolaguirre, también a México. También María de Maeztu, la hija de la maestra Juana Whitney de la escuela de la calle Berastegi de Bilbao, tuvo que partir al exilio en 1837, a Buenos Aires. Ya mayores, en 1942, Valentín de Zubiaurre y Pilar Elejoste se casarán en la basílica de la Virgen de Begoña.

Las proyecciones se complementan con deliciosas fotografías que muestran estampas divertidas y de las tragedias cotidianas de la época; de las labores de la tierra; la elegancia de la burguesía, Pilar al piano ante la mirada ausente de su padre, también la pobreza de las gentes… De las pinturas, recuerdo el cuadro de Polin niño, la de Los intelectuales de mi aldea, ¿no estaba el marino Shanti Andía, no?…  Retomamos el discurso de Juan de la Encina de 1915, antes de convertirse en cuñado de los pintores:  no hacen los hermanos Zubiaurre otra cosa que seguir una corriente estética que se inició en Bilbao hace unos cuantos años, y que, lentamente, va aportando al arte nacional el espíritu de una región hasta hace poco muda.

No es que le falte el sonido, es que tiene el silencio.

Y a otro le parecerá otra cosa