VIAJAR CON EPI Y JAVI · Una ‘pájara’ en el camino hacia Bélgica

Otro día gris, amanece lloviendo pero la previsión dice que irá a mejor.

Hoy hemos completado la mitad de nuestra aventura-reto, estamos prácticamente en la frontera con Bélgica. Última noche en Alemania en un camping muy tranquilito, mañana daremos unas cuantas vueltas y revueltas antes de llegar a Lieja.

Ha empezado bien el día, pedaleo tranquilo a la orilla del Rhin durante bastantes kilómetros y al final vuelta al campo.

Y hoy por fin, foto con el espárrago.

En uno de los campos estaban los temporeros recogiendo algo que no sabíamos que eran, al llegar a su altura, eran fresas.Nos han vendido un cestillo y estaban buenísimas.

Avanzábamos entre trigales, flores y huertas de algunas hortalizas desconocidas.

Pero llega el kilómetro 75 y algo no va bien, una pequeña pájara planea sobre una de nuestras cabezas, pero la pájara va creciendo y se convierte en un pajarón con su cuadrilla. Vaya 25 kilómetros más largos. Para complicar un poquito mas el final, ha sido un final con bastante desnivel.

Si ya vienes tocado, esto te remata. Los que alguna vez habéis sufrido una pájara, ya sabéis de lo que hablo. Te puedes pasar caminando, en bici, escalando… y los que no, intentaré explicarlo.

Cuando tu cuerpo dice basta. Ya no quiero seguir, pero tu cabeza sigue ordenando, sigue, sigue y vas avanzando. Pero cuando tu cuerpo y tu cabeza entran en sintonía y ninguna de las dos quiere, es muy complicado avanzar. Pero ahí está tu compañero de Camino, para animarte, darte aliento, hacerte parar para recuperar, hacerte comer un plátano, barrita, frutos secos, pasarte su bidón de agua, porque tú no eres capaz ni de sacar el tuyo, respeta tu silencio sabiendo que la impotencia que sientes en ese momento es igual o mayor a la sensación de derrota.

No pudiendo pedalear ni en el llano, es difícil alcanzar el final. Solo deseando llegar, descansar, dormir y recuperar.

Siempre incondicional.

Buenas noches y buen camino.