Las calles de Durango se quedan pequeñas para poder absorber una populosa Korrika de ensueño
La idiosincrasia del callejero de Durango ha obligado a que Korrika en ocasiones se estancara de la cantidad de personas que la han secundado en un ambiente de alegre fiesta y con momentos de reivindicación.
La entrada al municipio proveniente de Abadiño ha sido menos populosa aunque con mucha fuerza y ganas. No obstante, según se avanzaban metros y kilómetros a favor del euskara, la carrera ha llegado a masificarse lo que da mayores esperanzas al uso del idioma ancestral de Euskal Herria. La climatología, ser sábado, la hora -siete de la tarde- ha ayudado a que el éxito de la cita de AEK fuera colosal.
Mujeres y hombres de todas las edades, desde bebés a personas en sillas de ruedas o motorizadas han gritado los lemas de la edición entre el júbilo también de quienes aplaudían e, incluso, se emocionaban con la fuerza de todo un País haciendo un año más historia.