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Hablamos con Antonio Mata y Yuki Onoda, pareja de Durango que ha vivido el tifón Jebi y un terremoto en Japón

Mugalari.info

Antonio Mata y Yuki Onoda están de vacaciones con sus dos hijos en Japón visitando a la familia de ella. Estos vecinos de Durango han vivido el tifón Jebi que asola estos días el país asiático y considerado el más virulento de los últimos veinticinco años. El huracán ha dejado ya diez muertos y al menos trescientas personas heridas, así como incontables desplazados.

Yuki Antonio Japon

Antonio Mata, primero por la derecha, y Yuki agachada, junto a sus hijos, y padres de ella en su visita a Japón.

Yuki es natural de una localidad de 56.000 habitantes llamada Minamisouma, prefectura de Fukushima, región que el 11 de marzo de 2011 sufrió el recordado accidente nuclear, catalogado como el segundo más fuerte del mundo tras el de Chernóbil (Ucrania). No obstante, el martes ellos estaban en Tokio, capital del país nipón. «Estábamos en el barrio de Ikebukuro. Las noticias iban explicando la ruta que podría tomar el tifón en su entrada por Japón y cómo deberíamos actuar en caso de encontrarnos cerca de su paso», relata la pareja a MUGALARI.

Ese mismo día tomaron un tren para desplazarse a Minamisouma. Allí comprobaron que había líneas suspendidas que iban hacia Kansai por donde el ciclón estaba entrando. Tras llegar a su destino, esa misma tarde, «el viento empezó a soplar más fuerte acompañado de lluvia a veces muy fuerte y otras veces apenas sirimiri. La lluvia y el viento venían compañados por tormenta».

EVITAR SALIR A LA CALLE · Ambos recuerdan que las campanillas que los japoneses instalan en sus casas «para que tintineen al viento no paraban hasta bien entrada la madrugada. Momento en el cual todo volvió a la calma». En el interior del hogar hicieron vida normal. «Evitamos salir mucho a la calle por si debido al viento hubiera cualquier desprendimiento».

Pero ahí no quedó el temor de cuanto iban conociendo que ocurría en el país. «Una vez que se calmó y pudimos dormir con más calma, nos despertó a las seis de la mañana un pequeño terremoto que según las autoridades era de apenas 2 en la escala de Richter. Lo inusual fue que duró bastantes segundos. Tras ello volvió la calma. Por ahora hace buen tiempo y ha vuelto el calor», analizan tranquilizando a sus familiares y conocidos.

Antonio avanza, además, una noticia que ha sorprendido a la sociedad japonesa. «La noticia, aparte del tifón Jebi, es que el gobierno ha reconocido hoy -por ayer miércoles- que la muerte por cáncer de pulmón de un trabajador de la central de Fukushima es debido a la radiación sufrida durante su trabajo», aporta desde Japón.

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