EH Bildu de Durango tratará en pleno de paralizar todos los planes urbanísiticos que están sin aprobar y abrir un debate ciudadano

EH Bildu presentará en el pleno del próximo jueves una moción que nace como objeto de «paralizar todos los planes urbanísticos que están sin aprobar (en el Pleno quieren aprobar una de ellos) y poner en marcha el debate ciudadano sobre la ordenación urbana con el PGOU», detallan desde la coalición abertzale.

Publicamos, a continuación, la moción íntegra que se va a elevar a pleno.

Moción sobre el Plan General de Ordenación Urbana

En abril de 2005 fue aprobada definitivamente la segunda revisión de las Normas Subsidiarias  de Durango, normas que fueron diseñadas y debatidas en la década del 2000. Las NN.SS fueron aprobadas dentro de un marco normativo y un contexto socioeconómico diferentes, esto es, fueron aprobadas en la época de la especulación y de la burbuja inmobiliaria. Si tuviéramos que definir con una palabra aquellas normas, “ladrillo” sería la palabra idónea, acompañada de apellidos como especulación o el urbanismo al servicio de intereses privados.

Más de 3.800 viviendas si añadimos las 554 del PERI ferrocarril, la vivienda, es decir, un derecho fundamental convertido en un producto económico y el ayuntamiento de Durango con la caja registradora abierta para recaudar con ello.

Pero la burbuja inmobiliaria reventó y en Durango el cuento de la lechera empezó a no cumplirse. Que se lo pregunten a los vecinos y vecinas del Aramotz, a la asociación Herria, quienes les prometían en campañas electorales sucesivas un centro cívico, ahora les dicen que no hay dinero. La mala planificación y poner todos los huevos económicos de un municipio en la cesta del ladrillo tiene sus consecuencias.

De esta manera nos encontramos en el año 2018, con unas normas que hay que renovar y convertirlas en un nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU). Un plan que se ha retrasado de manera indisimulada por el equipo de Gobierno. Un plan que debe fijar un escenario de cara a 2030, para diseñar las bases del Durango en el que queremos vivir y el que queremos dejar a nuestras hijas e hijos. Durante el año 2017 se realizó el diagnostico participativo de dicho Plan, en el cual la línea estratégica con más apoyo fue la denominada “apuesta por la regeneración urbana socialmente inclusiva” en la cual aparece como línea estratégica a futuro en el ámbito de la vivienda “Evitar la ocupación de nuevos suelos y potenciar el equilibrio de usos, logrando la consolidación de una trama urbana desarrollada”.

Pues bien, una vez más haciendo oídos sordos a la ciudadanía y a la lógica, el equipo de gobierno demora injustificadamente el inicio del Plan General para que puedan desarrollarse todos los planes urbanísticos que no han podido hacerlo hasta ahora. Planes que ocupan suelos nuevos, suelos sin urbanizar, para seguir construyendo viviendas en Durango, en vez de regenerar el patrimonio edificado y hacer políticas efectivas para ocupar la vivienda vacía.

Artabilla, Eguzkitzagoiena, Kabilduoste, Birjinioste, Arripausueta, Iparzabalarra…Además de ser toponimia de lugares de Durango, son el nombre de planes urbanísticos que llevan el ladrillo a todo el suelo urbanizable de Durango, planes en algunos casos que siguen con la idea de la baja densidad, el chalet, mientras 900 personas inscritas en Etxebide demandan una vivienda en alquiler, el gobierno de Durango quiere seguir construyendo chalets. Y todo ello para que los especuladores que en su día hicieron la cuenta de la lechera no vean frustradas sus expectativas.

Es por ello, que el pleno del ayuntamiento de Durango:

• Se compromete a adoptar en septiembre de 2018, el acuerdo de formulación del avance de la revisión del PGOU, y en virtud del artículo 85 de la Ley 2/2006 del suelo y urbanismo del País Vasco, proceder a suspender toda clase de aprobaciones, autorizaciones y licencias.