Osteguna,
2025ko Urtarrilak 30

MugaKultura

loader-image
Durango
9:40 am,
temperature icon 9°C
Humidity 98 %
Ráfagas de viento: 60 Km/h

DAZ despide con cariño a la comerciante duranguesa Juanita Erdoiza fallecida a los 103 años el martes

I. Gorriti

En silencio. Se ha ido en silencio. Tenía 103 años. Juanita Erdoiza Alberdi ha sido, por lo tanto, una de las personas más longevas de Durango. Ha sido la asociación vecinal DAZ del casco viejo de la villa quien, con cariño, le ha recordado en las redes sociales, como vecina histórica que ha sido de Artekalea y propietaria de una recordada tienda de ultramarinos que hasta regentarla ella era de Rafael Marzana. Falleció el martes y el funeral católico por su persona se llevó a cabo en la parroquia de Santa Ana el jueves.

Juanita

Erdoiza en su hogar de Artekalea con fotos de sus seis hijos y marido. PHOTO. DAZ (Jon Roman)

Gracias a una revista de DAZ en la que entrevistaron a Juanita cuando cumplió 90 años hoy sabemos más sobre ella, su testimonio. En la divulgación evocaba cómo después de la guerra del 36 regresaron a su casa de Durango y cómo se hicieron cargo de la tienda ubicada casi junto al arco de Santana en un inmueble que a día de hoy un cartel anuncia que en ese solar se construirán nuevas viviendas.

Ella respondió que «era la época de las cartillas de racionamiento y en la tienda llevábamos bastantes, pero también era la época del extraperlo, gracias a eso íbamos tirando. En cierta ocasión vinieron dos hombres de inspección, miraron la tienda y se marcharon, pero podrían haberme puesto una multa. De todas formas teníamos varios sitios para guardar las cosas, un depósito antiguo que estaba en el suelo para el aceite y un doble techo para el azúcar y demás productos».

· Su marido fundó FUNSAN · Casada con Juan Birichinaga, Juanita crió a sus seis hijos e hijas. «No he hecho otra cosa en esta vida. El trabajo de casa, la tienda, criar los hijos, todo para sacarles adelante. Cuando tuvimos el tercer hijo veíamos que la tienda sola no daba para mantener a los tres. Mi marido, Juan Birichinaga, siempre quiso que tuviesen estudios; él y otros socios crearon la cooperativa FUNSAN y gracias a eso pudieron estudiar todos».

En la entrevista, los portavoces de DAZ le cuestionaban sobre cómo era el casco viejo y Artekalea décadas atrás. «Todo era muy diferente, la gente venía a la tienda a cualquier hora, incluso los sábados y domingos a comprar pan y otras cosas. Cuando las aldeanas bajaban a la plaza, a la vuelta pasaban por la tienda y lo que les sobraba me vendían muy barato. La vida que había en Artekale ni comparación con lo de ahora, era la columna vertebral de Durango con la imprenta de Arévalo, la bodega de González, la peluquería de Bayo, Café Legarreta, Mari la chata, Itzela y otros muchos».

Llegada entonces a sus 90 velas, le preguntaban si iba a por los cien años. Antes de saber qué respondió debemos recordar que ha fallecido esta semana con 103 años

-¿Cumplidos 90 años , ahora a por los 100?

«No, yo sólo pido uno más. Entre las visitas y la partida de cartas en la residencia yo ya tengo bastante».

Ayúdanos a crecer en cultura difundiendo esta idea.

Bilatu