Concluyen las obras de limpieza del Arco de Santa Ana de Durango, «construido en 1566 y restaurado en 1744»

En su firme apuesta por la conservación del patrimonio histórico de la villa, el pasado 4 de julio, el Ayuntamiento de Durango, inició las obras de renovación del Arco de Santa Ana. Los trabajos finalizaron ayer. Se trata de una intervención para la cual, el consistorio ha destinado cerca de 50.000 euros con el objetivo de continuar dando pasos al frente en cuanto a la regeneración y renovación del patrimonio histórico y arquitectónico de la villa se refiere.

La alcaldesa de Durango, Aitziber Irigoras (PNV), y la Concejala de Urbanismo del Ayuntamiento, Mari Jose Balier (PNV), visitaron ayer el monumento. «El consistorio es consciente de que los edificios y monumentos que integran el Patrimonio Histórico de Durango juegan un papel clave para hacer entender el pasado de la villa puesto que representan la historia y la tradición de nuestro pueblo”.

Por ello, aseguró que “su protección es vital y el Ayuntamiento asume la responsabilidad de preservarlos para las futuras generaciones”. Tal y como explicó al inicio de las labores de restauración, la primer edil jeltzale ha hecho especial hincapié en la importancia de la conservación de los monumentos históricos de la localidad como continuidad de su existencia. La regidora ha recordado que la administración local continuará desarrollando diversas intervenciones de puesta en valor de los elementos dañados o deteriorados, con el propósito de adaptarlos a las nuevas demandas culturales y sociales.

Balier e Irigoras mira al Arco de Santa Ana. PHOTO · Durangoko Udala

· Trabajos de restauración e iluminación · Las labores de renovación se han centrado en la propia puerta, así como en el «escudo renacentista». Los trabajos ha estado dirigidos, principalmente a la limpieza y saneado (eliminación de elementos ajenos y restos de grafitis, mediante un limpiador en gel a base de disolventes de baja toxicidad, limpieza mediante lanzamiento de agua a presión), tratamiento de juntas, reposición de volúmenes faltantes, teñido de balaustrada de hormigón y morteros (mediante pintura de capa fina), aplicación de hidrofugante, tratamiento de elementos metálicos (eliminación de óxidos) y aplicación de anti-graffiti, entre otros.

Asimismo, cabe recordar que el Ayuntamiento ha aprovechado la reformas para acometer mejoras en la luminaria, renovando 6 puntos de luz. Las viejas bombillas han sido sustituidas por otras de tecnología led que posibilitarán un ahorro en el consumo energético.

· Datos sobre el Arco de Santa Ana ·

Siempre según versión del Ayuntamiento de Durango, el arco de Santa Ana, fue construido en el año 1566 y restaurado en 1744. Se trata del
único testimonio de las seis puertas con las que contaba la antigua muralla que rodeaba la villa, una puerta de estilo barroco, en cuya estructura se puede observar un escudo imperial y una hornacina donde guarda la imagen de una virgen.

«Está compuesto por un grueso arco de medio punto, sobre el que descansa una balaustra de piedra. Encima dos torretas laterales y una espadaña central que ostenta, por un lado, un escudo de armas imperial y, por el otro, un nicho. Se diseñó en clave de lujo: un gran arco del triunfo de dos pisos con un paso en arco de medio punto. Está construida en sillería. Sobre una pequeña terraza se alza el segundo piso, un ático que tiene el escudo de armas de los Austrias y a los lados dos garitones cilíndricos cubiertos por una cúpula», detallan fuentes municipales.