DÍA INTERNACIONAL DE LOS MUSEOS · ‘De los espacios otros’, por Anisia Serendipia
Anisia Serendipia
MIS OJOS, QUE CODICIAN COSAS BELLAS
La culture est l´inversion de la VIE_ En mayo del 68, en una pared de la Calle de Vaugirard de París se podía leer esta frase: la cultura es la inversión de la VIDA. Hoy, 18 (también de un mes) de mayo, se celebra el Día Internacional de los Museos del año 2017.
El tema en esta ocasión es Museos e historias controvertidas: decir lo indecible en los museos. Con él se pretende resaltar el papel de estos espacios que, al ponerse al servicio de la sociedad, pueden convertirse en centros de “pacificación de las relaciones entre los pueblos”. Y apuntan que con la frase decir lo indecible en los museos, lanzan una invitación a los museos a posicionarse como actor de la asimilación de las historias traumáticas pasadas gracias a la mediación y a la pluralidad de puntos de vista expresados.
Museos y bibliotecas son heterotopías en las que el tiempo no cesa de amontonarse y de encaramarse sobre sí mismo- decía el magnífico Michel Foucault.
Decía otro magnífico, León Tolstoi, que la belleza, o lo que nos gusta, no puede servirnos de base para una definición del arte, ni los numerosos objetos que nos producen placer han de considerarse como modelo de lo que debe ser el arte. Y el simpar Rimbaud decía saber de cielos que estallan en rayos, de trombas, resacas y corrientes; de noches… del Alba exaltada como una bandada de palomas. ¡Y, a veces, dijo, yo sí he visto lo que alguien creyó ver!
Pero todas esas cosas las dijeron otros.
¿Quién no presta oídos a una campana cuando por algún hecho tañe? Es mayo y los Museos esperan. Esperan tímidamente para, como reza el catálogo de una de las dos exposición que acoge actualmente el Museo de Arte e Historia de Durango, la del Equipo SAISA, que nos muestra una serie de grabados bajo el título Tañendo campanas, recibir la mirada del espectador y así, si estará completa la obra.
Picasso y el Equipo SAISA en el Museo de Arte e Historia, tal vez puedan decir como Rimbaud aquello de ¡yo sí he visto lo que alguien creyó ver!, que supongo es lo que espera cada artista.
Por ahogarme de nuevo en ese río de dorada quietud, qué no te diera: mi peso en oro, en sol, en mariposas…
Hontza Museoa, en Mañaria: No se puede defender lo que no se ama y no se puede amar lo que no se conoce.
Kurutzesantu Museoa, en Kurutziaga de Durango
Como decíamos ayer, hoy hace un año: Una visita a un Museo es siempre una sensación, algo irrepetible. Me había vestido de punta en blanco, y al subir al tren se me perdió un botón -Lo recuerdo, lo recuerdo, a menudo pensé en ello desde entonces-
Hijo de las Musas, de Museo se dice que era un gran músico capaz de curar con sus bellas melodías. Este es el de Durango, entren en todos, es una invitación a posicionarse como actores de la asimilación de las historias traumáticas pasadas gracias a la mediación y a la pluralidad de puntos de vista expresados. “Ser cultos es el único modo de ser libres”, lo dijo José Martí, pero está en sus manos.
Y a otro le parecerá a otra cosa.
· Anisia Serendipia es licenciada en Filología Hispánica, documentalista y atesora estudios de Comisariado y Coordinación de Exposiciones. Es autora del blog del que toma su nombre: