Mola invitó a prostitutas a los italianos por bombardear Durango y Franco condecoró a la Legión Cóndor por masacrar Gernika

I. Gorriti

El fascismo está por encima de cualquier vergüenza y escrúpulo. Bombardear Durango y Gernika-Lumo, así como otros 30 municipios vizcainos más, y de otras latitudes, tuvo su ‘reconocimiento’ y ‘recompensa’, así escrito, entre comillas. Asesinar desde el aire a personas inocentes, civiles, de todas las edades… tuvo ‘premio’, también entre comillas.

Según investigaciones de Gerediaga Elkartea, los legionarios italianos de Benito Mussolini que mataron a más de 300 personas en las iglesias de Santa María, San José, en un convento de monjas… en sus casas, ametralladas por las calles y laderas, celebraron esta masacre inhumana “con prostitutas” en Zaragoza. La misma tarde del 31 de marzo de 1937. Hay documentos que lo certifican.

Si a los pilotos que ‘mataron’ Durango, el general golpista Mola les invitó a ‘celebrarlo’ en burdeles; a los de la Legión Condor que el tal día como hoy de 1937 acabaron en Gernika-Lumo con personas indefensas y echaron abajo todo un pueblo por reconstruir de las cenizas, el general golpista Franco les condecoró en León, como detallan unas fotografías que permanecieron siete décadas inéditas.

Bizkaia fue campo base de tiro, de pruebas bombarderas de la Aviación Legionaria italiana y de la Legión Cóndor. El acto en el que el totalitarista Franco condecoró a los nazis por su labor terrorista en Gernika-Lumo y otros municipios aconteció en la base aérea de La Virgen del Camino de León y fue obra del fotógrafo Manuel Martín.

Así quedó Gernika-Lumo el 26 de abril de 1937, tal día como hoy.

La familia que llegó a tener hasta cuatro empleados en su tienda, donó el año pasado un banco de fotos familiar con 150.000 negativos de la saga Martín de todo el siglo XX a la Dirección General del Libro, Archivos y Bibliotecas del Ministerio de Cultura.

Según las crónicas de la época que estuvieron presentes en al condecoración a una escuadrilla de la Legión Cóndor, desde la tribuna, Franco, se dirigió a Wolfram von Richthofen, comandante en jefe de la Legión Cóndor: “El Führer -Hitler- fue el hombre que en un momento de peligro supo querer y comprender a España”, ‘argumentó’, también entre comillas.

Y no acabó ahí la despedida de Franco. Lo macabro puede tener con el fascismo siempre un sentido aún más terrorífico: “Tanta sangre habéis dejado, de la que brotará esa primavera, las flores y las amapolas de la paz”, según recoge el periódico Publico.es en León. Quedó para la triste historia el 22 de mayo de 1939.