MAURO SARAVIA · «La resistencia tan fuerte del frente vasco no hubiese sido tal sin el apoyo y participación de mujeres»
Iban Gorriti (Mugalari)
Hacía falta. Era necesaria una exposición fotográfica que nos haga ver que hay gudaris y milicianos del Eusko Gudarostea vivos y que merecen el lugar que ni gobiernos ni sus vecinos les damos. Gracias al trabajo de chileno-vizcaino Mauro Saravia e Intxorta 1937 Kultur Elkartea será posible. Es posible. Su primera puesta de largo será el 2 de marzo en la planta baja del edificio de las Juntas Generales de Bizkaia en la calle Hurtado de Amezaga, de Bilbao. Entre ellos, ha fotografiado al exsoldado durangués del lehendakari Aguirre, Gregorio Urionaguena, de ANV.
La siguiente parada será en abril, en Elgeta, junto al homenaje de mujeres represaliadas que organiza Intxorta 1937 Kultur Elkartea. El titulo de la obra es Azken Batailoia y hace referencia a que «en Euskadi, cuando los batallones tenían bajas, se reagrupaban en nuevas formaciones. Como estos son los últimos combatientes vivos, me parece que el titulo no podía ser otro».
Esta es la primera parte del proyecto que se complementa con un fotolibro y una serie de imágenes a mujeres republicanas represaliadas durante la Guerra Civil y franquismo.
Sí. Azken Batailoia es la primera parte, pero me quedaba corto. Es decir, me faltaba la mitad de los relatos, el punto de vista de la mujer, por que muchas veces se habla de los hombres, de lo que sufrieron en el frente y en los campos de trabajadores, que no es menor. Pero, ¿y la mujer? ¿Qué pasaba con ellas?
Sé que ha investigado este capítulo…
Sí. Investigando te puedo decir que estuvieron también en el frente, con armas, apoyando, suministrando, creando la red y la infraestructura para que los gudaris y milicianos pudiesen estar allí. El rol que desempeñó la mujer durante la Guerra civil y posterior en Euskadi, fue importante. La resistencia tan fuerte del frente vasco no hubiese tal sin el apoyo y participación de las mujeres. Es curioso que esto no sea tan conocido o algo de lo que no se habla, “la importancia de la participación femenina” lo tenía claro el bando sublevado, que ejerció una represión y una violencia descomunal hacia ellas, tanto en la guerra, como en la posguerra.
La investigación es conjunta con Intxorta Kultur Elkartea.
De ella nace la necesidad de retratar y recoger relatos de mujeres que fueron represaliadas por el franquismo. Aprovecho a hacer un llamamiento a todas aquellas mujeres que deseen participar, ser retratadas y contar su historia. Especialmente si hay alguna miliciana, enfermera o participante directa o indirecta de la contienda o represaliada de origen vasco. Se comunique a través de la página web www.maurosaravia.com El fotolibro recogerá las dos partes: los gudaris y las mujeres. Estoy contento porque creo que aportará un punto de vista más rico, acerca de las huellas de la guerra y posguerra.
¿Qué tipo de retratos son? ¿Qué tipo de cámara ha utilizado y que discurso fotográfico pretende?
Son fotografías de 26 gudaris y milicianos, pero quizá tenga que ampliarlo de urgencia hasta 28 porque me han llamado dos más e intentaré no dejar a nadie fuera. Las retratos son diferentes tipos de planos, hechos en formato medio, con cámara analógica y apoyado por una cámara digital. Además existe el respaldo de los clips audiovisuales que recogen los testimonios de los combatientes. Se trata de un proyecto de “fotografía docuemental”.
¿Cómo es cada día de trabajo con ellos o ellas? ¿Cómo lo planifica?
Es muy intenso. Tengo un guion de trabajo y normalmente nos ponemos en contacto con la familia y acordamos una cita en el lugar que sea de Euskal Herria. Una vez en la sesión, tengo poco tiempo de trabajo por que los modelos se me cansan (risas), con razón, lo que hace que todo pase muy concentrado en un breve espacio. Cuando llego a casa, me vienen a la mente las historias, las vivencias, es tremendo, más de una vez me ha costado dormir.
¿Cuántos retratos exhibirá y de qué dimensiones?
De momento 26 retratados en tamaño de entre 70×50 y 20×30 dependiendo del tamaño de la sala en que se exponen.
¿Qué supone para usted ser el primero en protagonizar una exposición tan completa con los últimos excombatientes del Eusko Gudarostea?
Me parece increíble que no se haya hecho antes, pero es un honor enorme, sin restar méritos a quienes lleváis trabajándolo desde tiempo atrás.
¿Antes de viajar de Chile a Euskal Herria qué conocía de este capítulo histórico?
Una parte sí, por la familia, ni la séptima parte de lo que sé ahora. Conocía también el trabajo de algunos fotógrafos internacionales, no en vano la Guerra civil española, es uno de los conflictos bélicos mas fotografiados de la historia, pero ahora veo por otros ojos, literalmente. Sabía del exilio, que hermanos habían luchado contra hermanos (no entendía por que) y de los niños de la guerra.
¿Cómo le surge el interés por este trabajo tan aplaudible?
Una parte de mi familia materna es exiliada de Cataluña y por parte de mi padre, vasca. Quería completar los relatos familiares inconclusos, desde que tengo uso de razón ese conflicto es una de las razones por las que soy chileno. Estoy orgulloso de ser chileno, es raro, a veces siento que no soy tan de allí ni tan de aquí.
En este tiempo, por ley de vida, han fallecido algunos de los excombatientes vascos que ha fotografiado y otros no ha llegado a poder hacerlo… ¿Cómo lo ha sentido?
Me he sentido privilegiado, por haber tenido la fortuna de conocer y compartir momentos con estas grandes personas, no puedo evitar sentirme muy triste cada vez que alguien parte. Entiendo que han cumplido un ciclo, pero siempre me quedo con la sensación de que no los hemos aprovechado lo suficiente, que podemos aprender muchísimo mas de ellos y ellas..
¿Mantiene el contacto con ellos? ¿Son muy diferentes?
Si, con la mayoría, cada persona es un mundo, pero tengo un vinculo afectivo y me siento en deuda por que me han enseñado mucho.
¿Ha llegado a emocionarse en algún momento?
Me he emocionado todos los días, en cada sesión, porque están compartiendo sus vivencias, te están narrando de primera mano, lo que paso, cómo paso y cómo lo vivieron. Me acuerdo de muchas, por ejemplo el caso de una persona (de convicción republicana) que construyó el denominado Cinturón de hierro. Cuando entran los franquistas a Bilbao, fue alistado a la fuerza por el ejército sublevado y me cuenta que se encontró en primera línea, fusil en mano disparando con ojos cerrados muriéndose por dentro, sabiendo que al frente estaban sus dos hermanos.
¿Qué otras historias?
Historias me he encontrado de todo tipo: Desde un hombre que por sus ideas y convicción, por pensar distinto estuvo 21 años preso. Otro que jamás hablo de la guerra y su vida con sus hijos, por que literalmente decidió “no criarlos desde el odio”. Un niño de 14 años se fue a combatir en un barco, sabiendo que si moría, nadie lo reclamaría ya que no estaba inscrito en ningún lado. Así el armador no tendría problemas. Por otra parte de miliciano o gudari, caer preso, pasar a campos de concentración, realizar trabajos forzados, exiliarse, ver morir a sus familias. Imagínate, escuchar a las personas contando sus vivencias, sus estrategias para sobrevivir, las injusticias y atrocidades que vieron, una tras otra. Terminas emocionalmente afectado.
¿Qué espera de la exposición?
Que se vea y mucho, en muchos lugares, que estas historias de vida no pasen desapercibidas. Necesitamos empatizar con este tipo de vivencias para que a través de la empatía se fomente el diálogo y así cultivar la paz. El mensaje es muy importante, la guerra es mala, es atroz, no nos podemos permitir “más guerras”.
Ha tenido el apoyo de Intxorta 1937 Kultur Elkartea en todo momento y ellos el suyo. ¿Cómo valora este esfuerzo conjunto?
Es súper enriquecedor. Imagínate que una organización que esta reconocida con el premio René Cassin del Gobierno Vasco y lleva 20 años trabajando en memoria histórica apoye tu proyecto y se involucre, es un regalo. Además con Julia (Monge) y Juan Ramón (Garai) hemos hecho un gran equipo.
Prevé que la exposición se estrene también en su otro país, Chile. ¿Qué puede adelantar al respecto?
Si, en varias salas en el 2017 y moverla por la diáspora vasca. Que se difunda… Que se sepa quiénes estuvieron allí, cómo se defendió la democracia, la libertad y Euskadi…
Ha sido padre en Bizkaia. Disculpe la difícil pregunta: ¿Se ve más ‘allá’ o ‘acá’?
Por ahora acá. En los próximos años con mi esposa, que es vasca, lo hemos decidido así, para que mi hija este con sus aitites que siempre me echan una mano y son maravillosos…
Le conozco y sé que usted es una persona agradecida.
Sí porque soy consciente de que este trabajo no hubiese sido posible sin la colaboración de los gudaris y milicianos, sus familias, Residencia Arbildu, Intxorta 1937 Kultur Elkartea, Aranzadi, Mugalari, Museo Cinturón de Hierro de Berango, Frentes de Euskadi, Lemoatx 1937, Burdin Hesia Ugaon, Galdakao Gogora, Patxatxa taldea y muchas más…. Perdonad si se me escapa alguno… Sin la implicación de toda la comunidad, este proyecto no hubiese sido posible.