UN AÑO DE LA ORDENACIÓN DE JONATHAN MARTÍNEZ | «Espero no ser el cura más joven ni de Durango ni de Bizkaia»

I. Gorriti

Es el cura más joven de Durango y tal vez de Bizkaia. Se llama Jonathan Martínez Gragera (Durango, 12 de noviembre de 1978). El pasado domingo 7 de junio se cumplió un año de su Ordenación sacerdotal en Puente la Reina (Nafarroa) y posterior primer misa que celebró en la villa de la que es natural. Con anterioridad, este misionero de la congregación de los Sacerdotes del Sagrado Corazón de Jesús fue ordenado diacono en Bahía de Caráquez (Ecuador) localidad suramericana en la que reside.  

Jonathan Martínez celebrando su primera misa en Durango ahora hace un año. | PHOTO | Iban Gorriti

El pasado domingo se cumplió un año de su sacerdocio. ¿Han pasado rápido estos doce meses?

Rapidísimo, el tiempo vuela, y cuando estas en plena actividad los días pasan casi sin enterarte.

¿Cómo recuerda ese día? ¿Cómo lo sintió?

El día de la Ordenación sacerdotal fue un día especial. Lo recuerdo con mucha alegría e ilusión y lo viví con intensidad. Especial también porque estuvimos juntos familia, amigos y hermanos de Congregación.

¿Aquel domingo cumplió un sueño?

Puede decirse que sí, ya que han sido años de preparación, de ir creciendo día a día.

Bendición. | PHOTO | I. Gorriti

¿Será el cura más joven en la actualidad de Durango y quizás de Bizkaia?

Espero que no. Sabemos que no hay muchas vocaciones, pero seguimos rezando y trabajando para que haya jóvenes que sigan este camino de la vida religiosa o diocesana.

¿Qué análisis hace de la falta de vocaciones en la iglesia cristiana católica?

Está claro que hay falta de vocaciones. Los tiempos han cambiado, las razones pueden ser varias, el avance de la sociedad en todos los sentidos. Como digo muchas veces aquí, sólo necesitamos de Dios en las necesidades, cuando las cosas van mal, mientras todo esté bien, Dios es prescindible. Todo lo que tenemos o vivimos, es porque nos lo hemos ganado, no porque Dios haya tenido o tenga nada que ver. Sería bueno que cada uno reflexionara sobre ello y tomase conciencia.

¿Qué opinión le merecen las otras religiones?

Respeto en primer lugar. Pienso que todas las religiones tenemos una misma raíz, una fe, y aunque con algunas cuestiones que nos diferencian se sigue trabajando por la unidad.

Martínez es un seguidor del Athletic desde niño, desde Ecuador también. | PHOTO | Mugalari

Usted es misionero. La sociedad tiene una imagen de ustedes que empatizan más con la sociedad que sus compañeros no misioneros. ¿Lo cree también así?

Puede ser. La misión o trabajo es el mismo, todos dejamos casa, familia, amigos, es verdad que algunos dejamos incluso el país, pero todos hacemos una opción de vida en servicio y disponibilidad para los demás, en el que no puede faltar el anuncio del evangelio.

¿ Cómo vive un joven tres votos: castidad, pobreza y obediencia?

Hay que vivirlos con  naturalidad y crecer día a día en la vivencia de los tres votos. Es una opción de vida que uno se va planteando con el paso del tiempo

¿Le gustaría que la Iglesia diera un paso más y ustedes pudieran vivir en pareja e incluso contraer, si lo desean, matrimonio?

Hay que distinguir, en la vida religiosa vivimos varias personas en comunidad. ¿Usted se imagina que cada uno tuviéramos una mujer y estuviéramos viviendo todos juntos? La vida religiosa es una opción de vida, como otras, nadie te obliga, si quieres casarte para eso está la vida matrimonial.

Uno de los comedores que coordina el sacerdote de Durango. | PHOTO | Mugalari

¿Qué echa en falta de su Durango natal?

Bueno la distancia te hace recordar, te hace añorar, sobre todo en momentos puntuales del año y fechas que son más familiares. Se echa en falta la familia, los amigos, los lugares, la comida. De todo un poco.

Suele decir que en la villa tiene buenos ejemplos de sacerdotes: ¿A quién ‘debe’ parte de su vocación?

Bueno yo creo que el haber estudiado en los jesuitas de Durango, el haber sido monaguillo, todo eso influye. El Padre Antoñana, el Hermano Goya fueron entre otros mis impulsores. Digo entre otros porque hay gente cercana y actividades como convivencias, que te iban animando.

¿Cómo es el proyecto en el que trabaja ahí en Ecuador y dónde?

En concreto en la zona donde me encuentro, Bahía de Caráquez,  llevamos adelante dos parroquias y tres proyectos sociales. Dos comedores infantiles donde alrededor de cien niños acuden a comer diariamente con el fin de que al menos tengan al día una comida caliente o nutritiva. Estos niños provienen de familias muy pobres. Proyecto de apadrinamientos, donde se buscan padrinos de España para que puedan ayudar a los niños en alimentación, vestido, y salud, con una cuota mensual; y proyecto de Microcréditos, donde se adelanta un dinero a las comunidades campesinas para que puedan trabajar la tierra sembrando y cosechando si el invierno es bueno, ya que dependen de las lluvias, pues no hay sistemas de riego.

Jonathan Martínez Gragera junto a su familia en la primera misa celebrada en Durango, en la basílica de Santa María de Uribarri. | PHOTO | I. Gorriti

 ¿Cómo es un día cualquiera suyo?

¿Todo un día? Bueno, las responsabilidades que tengo son la administración de la casa con lo que ello supone de compras, mantenimiento,… Estoy encargado dela gestión de uno de los comedores sociales y del proyecto de apadrinamientos donde si el tiempo me da visito a las familias de los niños. Después en una de las parroquias acompaño al grupo de Cáritas y las misas que me correspondan bien en la ciudad o en las comunidades del campo.

Ha vivido en otros puntos del Estado. ¿Qué recuerdos guarda de aquellos destinos en los que estuvo?

Los recuerdo con gratitud por todo lo que me han aportado, pero guardo un recuerdo especial por un Colegio en Venta de Baños (Palencia) donde me encontré muy a gusto y feliz con el trabajo que realizaba y la gente con la que trabajaba.

¿Mantiene desde la distancia la amistad con las amistades de Durango?

Sí, y de hecho, aunque cada uno tiene su vida formada nos juntamos cuando podemos para dar una vuelta, tomar un café, charlar. Desde la distancia, por medio del internet.

La basílica estuvo llena en el día de la primera misa del durangués en su pueblo. | PHOTO | I. Gorriti

Suele volver en verano. ¿Qué planes le gusta hacer cuando regresa? ¿Dará alguna misa?

Es cada dos años cuando voy de vacaciones. Este año no me toca, hay que esperar. Cuando voy intento estar con la familia en todo momento y con los amigos. No tengo  planes para cuando vaya, descansar, intentar desconectar de aquí y disfrutar de las vacaciones. Con respecto a dar alguna misa, uno se pone a disposición del párroco, la dificultad en mi caso está en el idioma, pero ahí vamos, se hace lo que se puede y se recurre a lo poquito que aprendí.

Su preparación del sacerdocio muy larga… Usted mismo solía hacer bromas al respecto. ¿Cuántos años estuvo preparándolo?

En sí son siete años de estudios, luego depende de cada uno el tiempo que estime necesario y oportuno para la ordenación, y contando siempre con la ayuda de los formadores.

Una foto con parte de la comunidad de Bahía Caráquez, Ecuador. | PHOTO | Mugalari

¿Qué opinión tiene sobre el nuevo Papa católico?

Estoy contento, ya que es latinoamericano, y porque es un hombre muy abierto, muy campechano. No se hace problema en romper con los protocolos y eso dice mucho de él. Tiene muchos gestos cercanos a la gente y eso gusta. Su forma de dirigirse a las personas es sencilla y directa, le pone cariño. Ahora viene a Ecuador (Quito y Guayaquil), y la expectativa es grande, si Dios lo permite le veremos en Guayaquil.

¿Se ve en un futuro volviendo a vivir a Durango?

Dios dirá, pero si es dentro de la Congregación, lo más cercano es Navarra.