HONTZA MUSEOA | No se puede defender lo que no se ama y no se puede amar lo que no se conoce
Ayer se celebró el Día internacional de los museos. Por ello, el Hontza Museoa de Mañaria lo celebró y mantuvo sus puertas abiertas a la ciudadanía con entrada gratuita. La mugalari Anisia Serendipia visitó el interesante centro natural y el encuentro le removió aquello que definen como nostalgia.
Anisia Serendipia
Hontza Museoa: No se puede defender lo que no se ama y no se puede amar lo que no se conoce
| MIS OJOS, QUE CODICIAN COSAS BELLAS | Estrella brillante, si fuera constante como tú o Enrique
Divina Psiquis… te asomas por mis ojos a la luz de la tierra y prisionera vives en mí de extraño dueño. Para Darío la mariposa simboliza el “alma” del poeta, lo más bello del ser humano que bate alas por salir.
– Erase una vez en una aldea cercana… y que muy cerca de allí vivía un HOMBRE que llevaba en su corazón un “fuego” que le ardía constante como esa estrella que brilla, esa Divina Psiquis, dulce mariposa invisible que desde los abismos vienes… un HOMBRE que ya un día cobijó ese fuego que le ardía en una casa de piedra, en la que otrora ya cobijara su alma un poeta de aquella pequeña aldea cercana, y pétrea.
– Había una vez un alma que adoraba mariposas y resultó que una mañana vio las que había entre esas piedras. Las mariposas aparecen al claro del día, y ya muertas las halla la sombra. Nacen, aman, y brillan y mueren. Después, pasándolas una aguja, reposan en discretos ventanales para que sus eternos amantes las vean. La mariposa, dice, es el símbolo del alma del poeta, que es ese fuego de ese HOMBRE de la aldea cercana. Pero si la vida de la mariposa es breve: casi desearía que fuéramos mariposas y sólo viviéramos tres días de estío escribía Keats a su amada, el fuego de este HOMBRE es constante, igual que la estrella brillante del poeta cuyo nombre fue escrito en el agua, cuya vida tan breve como la de la mariposa, cuya poesía eterna.
– Cuando el fuego de Enrique apenas prendía ya veía mariposas. Por la noche llamaba a mis padres porque una de enormes alas quería robarme. Me decían: no tienes nada. No estás enferma. Te parece. La mariposa volotea , revolotea, y desaparece… Es la mariposa del inmenso Pablo.
– Al llegar al Paraíso, un poeta romántico, el indolente compañero de navíos, nos recibe: un albatros. El poeta es igual a este señor del nublo, cantó Baudelaire, sus alas de gigante le impiden caminar. Al igual que en el Arca o la Poesía, hay un sitio para todos según formas y colores… para el zorro que piensa, el visón alegre, el dulce Bambi y Gorgonia . Para Minerva, la lechuza mansa de Karen y los ratones de Cenicienta. También para la cantarina y despreocupada cigarra, la caracola de Lorca y para el Príncipe Rana, el que fuera Señor del Fiel Enrique cuando en los cuentos el desear todavía servía para algo… Para serpientes y faisanes, para esponjas de mar y estrellas.
La estrella constante de ese HOMBRE constante. El “alma” del mar trae espuma sobre el agua y muchos años después, en el Museo Hontza de Mañaria, había de traerme el recuerdo de aquel letrero Itxasoko Museoa que leía en unas ventanas, y que consideraba bien extraño porque estaba allí, a las faldas de unas piedras, cada vez menos montaña ... Yo doy todos mis versos por un hombre en paz. Lo dijo otro poeta cuya alma reposa en otra aldea no muy lejana.
Ciencias Naturales en Mañaria: información en http://hontzamuseoa.com/.
Y a otro le parecerá otra cosa.
* AnisiaSerendipia (Elorrio, 1962) es licenciada en Filología Hispánica, documentalista y atesora estudios de Comisariado y Coordinación de Exposiciones. Es autora del blog del que toma su nombre:
http://serendip-anisia.blogspot.com.es/
HONTZA MUSEOA FUNDAZIOA
Museo de historia natural
Dirección: Ebaristo Bustinza ‘Kirikiño’ Kalea, 18, 48212 Mañaria, Vizcaya
Teléfono:946 21 65 55
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PHOTOS | Stan Wise
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