CRÓNICA DE CONCIERTO | Revolta Permanent: ¡Que ‘corra’ la sangre por Bilbao La Vieja!
Iban Gorriti
Esta tarde en Bilbao la Vieja ha llovido sangre. La causa: un producto violento como pocos que no atiende al nombre de Revolta Permanent. Se llaman así, pero en directo no atienden a nada. Son un teatro tan maquinado como los secuenciadores de Aitor Abio en marcha. Sobre el tablado está prohibido sonreír. Sobre el escenario solo permiten la acción, la actitud, estrangular con cables de micrófono, gritar todo aquello que nos tragamos a diario y pesa en la espalda, romperse el espinazo y quedarse sin aire: estar a punto de vomitar físicamente; lo dicho, mentalmente ya lo hacen.
Tras una intro, los Mikel, Abio y las dos gargantas cantantes que tienen en común su mala hostia y el nombre (Iker) han arrancado función vespertina con ‘Revolta’, tarjeta de presentación inconfundible. A los cuatro hay que sumar otras tres bestias pardas que viajan siendo los siete uno: los técnicos de sonido Esteban Sánchez y Jon Asier Zubelzu, y a Beñat Cabrejas, al que ellos mismos denominan ‘el alma’ de la banda.
Minutos antes. Primeros compases de la celebración de la fiesta del final de Korrika: momentos amables con sonidos por el botxo más visitado con Xutik, Kerhau, Betagarri… Según uno iba avanzando hacia el otro lado de la ría; hacía la Bilvi, el cartel del re-‘corrido’ humano en favor del euskara de Urepel a Bilbao… se iba tornando oscuro.
Suena, como decíamos, una intro, relampaguea ‘Revolta’ y ‘Desagertu’ da paso a la bailable ‘Zer egin’. El corazón aún bombea sangre; los oídos todavía no. ¡Quizás no está todo perdido, a pesar de amplificar las traqueas ‘Dena galdu’!
| LOCOS Y LIBRES | La pleitesía comienza a ser lucha. La revuelta juvenil se tiñe de batalla, de violencia con ‘Bihotzean’ y del campo base se holla la primera cima de la jornada, ahí es cuando los de pensar con el corazón, se pasa a hacerlo con la mente. Ya todo vale, la locura se desata: ‘Zoro ta aske’ es el pasaporte al exilio de los sentimientos, a dejar que decidan el cuello, los pies, las caderas, las manos cornudas… Dan ganas de escucharla de nuevo para seguir recibiendo cartas anónimas.
Vídeo | I. Gorriti
Pero es el momento de romper las rodillas en el asfalto con ‘Belaunikatu’. Eso sí, sin rendirse. La falta de aire no justifica los medios a los nihilistas de Revolta Permanent. A partir de ahí, la ‘Matxinada’, hasta el momento de sentir la muerte del gozo sonoro: ‘Hilik’.
La esencia se mantiene en la txanpa final por la ría de meadas, de la nueva limpieza, de los sonidos irreversibles, del amor guitarrero de Mikel por lo oscuro, de la locura de los teclados de Abio, de los rapeantes Villa y Aginaga. Raíces siniestras, insurgentes, terroríficas, redundantes sin llegar a lo lineal, gritos, más gritos…
| VIVERO GAUA ESTUDIOS | El cansancio de los últimos días, de un concierto de la banda con nicho en Gaua Estudios (Mungia) ayer en Beasain, no se percibe ante un público que canción a canción va asimilando de mejor forma el producto permanente. Sin embargo, la génesis llega a su final. Dos canciones de bonus track. Suenan dos versiones, las mismas que camisetas viste en los últimos tiempo sobre el escenario Aitor Abio: Metallica y Slayer. De los primeros truena ‘Seek and Destroy’ y de los segundos ‘Raining blood’, en el momento en el que empieza a llover sangre de agradecidos abrazos. Mañana van a estar rotos.
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