El «conciertazo» de regreso por una noche de Artobixarra
Koldo, Moñigo, Urresti y Peio grabados por Mendi. | PHOTO | Xabier Domínguez
I. Gorriti
Me cuentan, me dicen, me chivan, me cantan que la reaparición del grupo Artobixarra en Elorrio tras más de una década de su disolución como banda de punkrock fue un concierto endemoniado. «Disfrutamos un montón», coinciden los componenetes del grupo como lo que desde abajo les jaleaban cada trueno que tocaban. Hubo movimientos en las primeras filas, pogo, jamming… «Tarareaban nuestras canciones, es flipante que se acordaran», se ríe Iñaki Urresti, batería de la banda y en la actualidad el parches del grupo Ghetto.
Un amigo de la banda no recordaba que sonaran tan bien cuando estaban en carretera. «La gente gozó mogollón y se notan nuestros años tocando. Los temas son los mismos pero creo que han ganado con los años por el tema nostálgico y porque creo que con los años hemos aprendido a tocarlas mejor», agrega el de Elorrio. El cuarteto vibró al verse de nuevo juntos sobre el escenario , gozando, sonriendo en todo momento y disfrutando de lo bien que estaba sonando y de cómo el público se lo estaba pasando. «¡Impresionante!», coinciden.
|EDICIÓN DEL CONCIERTO EN VÍDEO | El concierto no saldrá editado en CD, pero quizás se edite algún vídeo que deje constancia del regreso de ongi etorri a Txomin, amigo de los músicos. Como se aprecia en la fotografía estuvo grabando imágenes el zaldibartarra-neoyorkino Aitor Mendilibar (exDisorders). Habla Mendi: «La idea es editar el concierto entero porque se grabó el sonido y pusimos en total seis cámaras, dos de ellas GoPro. Espero poder hacerlo antes de volver a Nueva York, me quedo aquí un mes más», informa.
A pesar de estar cámara al hombro, Mendi (ahora en The Wilson’s) disfrutó del «¡conciertazo! Cantaba mientras grababa. Le mtieron caña, casi no pararon. Estuvieron como una hora e hicieron un beste bat», subraya al tiempo que recuerda cómo hicieron versiones de Cicatriz, Ume Gaiztuak y RIP.
Artobixarra volvieron a ser uno tras mes y medio de ensayos. El gaztetxe de Elorrio lleno, según me cuentan, me dicen, me chivan, me cantan.
