Igandea,
2024ko Abenduak22

MugaKultura

loader-image
Durango
9:25 am,
temperature icon 9°C
Humidity 87 %
Ráfagas de viento: 20 Km/h

‘Jeltzales de Abadiño, 110 años por y para el pueblo’, un reportaje de Mikel Garaizabal

Mikel Garaizabal

Mikel Garaizabal Iturriagaetxebarria
Desde la organización municipal de EAJ-PNV de Abadiño, este año, se han organizado unos actos con motivo del 110 aniversario de la creación de la junta local de EAJ-PNV. Se ha creído oportuno rendir un sencillo homenaje a todas aquellas personas que han trabajado por la difusión de los ideales legítimos y democráticos del nacionalismo vasco en nuestro municipio, Abadiño. Las siguientes líneas tratan de ser una aproximación histórica de los jeltzales locales.

Batzoki 5

El primer batzoki en Zeletabe, donde estaba antiguamente el ‘abarkatero’ | FOTOS CEDIDAS POR MIKEL GARAIZABAL

| EUZKOTARREN ABERRIA EUZKADI DA | EAJ-PNV lo fundó Sabino Arana Goiri (1865-1903) y entre las razones del origen del partido caben destacar tres:
a) El traumático final de las guerras carlistas y la abolición de los fueros (1876).
b) El cambio del modo de vida tradicional a consecuencia de la industrialización acelerada y la afluencia de mano de obra inmigrante.
c) El desarrollo de la literatura fuerista-romántica.

| Sabino Arana Goiri | Todo este movimiento promovido por el fundador de EAJ-PNV Sabino Arana Goiri, empezó a cosechar éxitos electorales muy pronto. El mismo Sabino fue elegido diputado provincial en 1898. El año siguiente fueron elegidos cinco concejales nacionalistas en Bilbao; mayoría absoluta en Bermeo en las elecciones municipales celebradas en 1901… En Abadiño y en Durangaldea fueron calando rápidamente los postulados de Sabino. En 1901, los jeltzales de la comarca acordaron medir sus fuerzas en las elecciones provinciales.

| PRIMERAS MARCHAS Y CONCENTRACIONES JELTZALES EN ABADIÑO (1904-1923) | En la asamblea Territorial celebrada en Bilbao por EAJ-PNV el 21 de septiembre de 1904, hubo
representación de Abadiño, por lo que se deduce que ya estaba en funcionamiento la organización municipal del partido en el municipio. El 26 de febrero de 1905, se celebró una gran concentración de nacionalistas llegados desde distintos puntos de Bizkaia, primero a Durango y después a Abadiño. Dicha concentración estuvo a punto de irse al traste debido, principalmente, a las presiones y amenazas de los carlistas, que eran
mayoría en ambos municipios.

Al año siguiente, el 8 de julio de 1906, una multitud de nacionalistas venidos de toda Bizkaia, cuya organización corría a cargo de jeltzales bilbainos, hicieron una peregrinación a Elorrio. Los organizadores quisieron agradecer a través de las páginas del Aberri al Batzoki de Abadiño, por lo bien que se portaron con todos los nacionalistas llegados en peregrinación. Por lo tanto, para el año 1906 el Batzoki abadiñarra ya estaba en marcha. El 9 de junio de 1918, los ezpatadantzaris del Batzoki abadiñarra, participaron en una concentración organizada por el Batzoki Tabiratarra de Durango que se celebró en Axpe. El objetivo de la
concentración era la de difundir el mensaje nacionalista en la comarca. Desde la creación primero de la junta municipal y después del Batzoki, los jeltzales abadiñarras trabajaron con ahínco en mejorar la institución más cercana, el ayuntamiento. Se organizaron varios mítines y concentraciones de jeltzales en la comarca con la finalidad de defender ese espíritu. Como ejemplo, el 9 de marzo de 1919, se celebró en Abadiño un mitin en el que intervinieron Mariano Ganboa, Ceferino Jemein y Enrique Orueta.
Ese mismo año, el jeltzale abadiñarra Sotero Badaya Iturrizaga, que más tarde sería alcalde del municipio, acudió a la asamblea de municipios vascos celebrado en Donostia y organizada por la recién creada Sociedad de Estudios Vascos – Euzko Ikaskuntza. En esta asamblea se llegaron a varias conclusiones generales aprobadas, en la que quedaría en un lugar destacado el municipio. De esta manera, se dotaba a los ayuntamientos de más derechos y reconocimientos. Fue un paso muy importante el que se dio en ese sentido.

Los abadiñarras, en colaboración con los de Durango, organizaron el 19 de agosto de 1923 una concentración de mendigoixales de marcado carácter propagandístico en Abadiño. Se concentraron mendigoixales de Durango, denominados Aberri Zintzuak, los de Eibar, los de la Juventud Vasca de Bilbao, denominados Irrintzi Bazkuna y los de Elorrio, Beti Gertu. Estos grupos de mendigoixales (montañeros) eran grupos de jóvenes nacionalistas pertenecientes a Juventud Vasca aficionados al excursionismo. En sus giras dominicales recorrían la geografía vasca y difundían el mensaje nacionalista.

| DICTADURA PRIMO DE RIVERA (1923-1930) |  Con la llegada al poder por la fuerza del militar Primo de Rivera, todo se fue al traste. Una vez que éste diera el golpe militar, la corporación municipal abadiñarra elegida por voluntad popular fue destituida y, en su lugar, fue designada una nueva corporación, afín a los ideales del militar. Durante esta época, los jeltzales de Abadiño se vieron obligados a trabajar en la clandestinidad y con numerosas restricciones por parte de los dirigentes locales.

| SEGUNDA REPUBLICA. INICIO DE UNA ACTIVIDAD SOCIO CULTURAL FRENÉTICA EN EL BATZOKI ABADIÑARRA. (1930-1936) | Fue a partir del año 1930, después de la asamblea celebrada en Bergara el 16 de noviembre del mismo año, donde se unieron las dos familias jeltzales Comunión Nacionalista Vasca (CNV) y el Partido Nacionalista Vasco (PNV), cuando comenzó el Batzoki de Abadiño con una gran cantidad de iniciativas socio culturales y políticas. Con las dos familias unidas con las siglas de EAJ-PNV, se crearon y se reestructuraron varios grupos tales como: Emakume Abertzale Batza
(EAB), Euzko Gaztetxo Batza (EGB), Mendigoixales, pelotaris, dantzaris, pandereteras.. Todos estos grupos creados desde el Batzoki de Abadiño, actuaban en distintos eventos de la comarca en
favor de los ideales nacionalistas. Después de celebrarse las elecciones municipales el 12 de abril de 1931, se proclamó la segunda República. En Eibar lo hacían al de dos días de las elecciones municipales. Jose Antonio Agirre, que salió elegido alcalde de Getxo en esas elecciones y que al de unos años sería Lehendakari del Gobierno de Euzkadi, hacía lo propio el mismo día de tarde.
Una labor fundamental en esta actividad del Batzoki la llevaban las emakumes de Emakume Abertzale Batza (EAB).Las emakumes eran mujeres nacionalistas valientes, que hacían una gran labor humanitaria y social en el municipio. Colaboraban en la educación de los gastetxus, en la preparación de las elecciones, con los mendigoixales… Las emakumes de Abadiño (EAB), el 25 de julio de 1932, junto a otras numerosas emakumes de la comarca, se desplazaron hasta el pueblo costero de Elantxobe, Allí, fue bendecida la ikurriña de estas emakumes. Esta misma ikurriña, que también fue portada por estas mujeres en el desfile del
primer Aberri Eguna celebrado en Bilbao el 27 de marzo del mismo año, fue donada por la junta municipal de Abadiño a Sabino Arana Fundazioa el 12 de diciembre de 2013, para su custodia y salvaguarda.

Batzoki 3

Ikurriña de Emakume Abertzaleen Batza de Abadiño, del 27 de marzo de 1932.

El 6 de agosto de 1933, Abadiño concentró a gaztetxus de la comarca, entre ellos también estaba el grupo de Abadiño. Al Euzko Gastetxu Batza (EGB) pertenecían hijos e hijas de los afiliados y simpatizantes de EAJ-PNV. Este grupo ofrecía una educación marcadamente vasca, religiosa y lúdica (bailes vascos, teatro..). En el Aberri Eguna del año 1934 celebrado en Gasteiz, los jeltzales locales lloraron la muerte de un compañero en accidente de tráfico. De regreso a casa, al autobús en el que viajaban jeltzales abadiñarras, una vez que estaba bajando Urkiola, se le rompieron los frenos y sufrió un accidente. A raíz de este percance el concejal de Abadiño Antonio Larramendi Oregi, natural del caserío “Uxar”, sufrió daños. Aunque, en un principio, parecía que el siniestro no revestía gravedad, al día siguiente murió el concejal Larramendi debido a las lesiones internas que padeció en el accidente. En el funeral, oficiado en la parroquia de San Trokaz, se dieron cita los principales dirigentes jeltzales de la época, tales como: Manu Robles, Landaburu, Esteban Isusi, Heliodoro de la Torre o Luis Arbeloa. Una gran multitud de jeltzales de la comarca vinieron a Abadiño a despedirse del concejal. En esa época, en la junta municipal de Abadiño estaban Pedro Astigarraga, Miguel Basabe y Mauricio Zubero. En la corporación municipal y en las filas jeltzales estaban Sotero Badaya, Francisco Iturriagagoitia “Patxi Lebario” , Hipolito Ardanza y Marcelo Munitxa.
La actividad frenética iniciada en el año 1930 en el Batzoki abadiñarra tuvo un parón en 1934.En octubre de este mismo año, con motivo de la conocida Revolución de Octubre, que tuvo su origen en Asturias, hubo varios desórdenes públicos y protestas. Por orden gubernativa, fueron clausuradas todas las sedes sociales de EAJ-PNV, acusados de haber participado en estos desórdenes. Salvo algunas excepciones, EAJ-PNV se mantuvo neutral ya que ni la combatió ni la secundó. A mediados de 1935 el Batzoki de Abadiño reabrió sus puertas. Fue en esa época de clausura, en la que varios jeltzales abadiñarras fueron multados acusados de haber realizado reuniones en el Batzoki.

| GUERRA CIVIL. LOS JELTZALES DAN UN PASO AL FRENTE (1936-1939) | El 18 de julio de 1936, se produjo la sublevación militar a la legalidad vigente y a la República. De esa manera dio comienzo la Guerra Civil. Meses antes hubo elecciones generales y hubo un cambio de gobierno, entrando a gobernar el Frente Popular (republicano). Tras ser investido el jeltzale Manuel de Irujo (EAJ-PNV) ministro de la República en ese nuevo gobierno, se aceleró el proceso de aprobación del Estatuto Vasco, aprobándose definitivamente el 1 de octubre en las Cortes. Días más tarde, el 7 de octubre y bajo el árbol de Gernika, Jose Antonio Agirre (EAJ-PNV) junto a sus consejeros formarían el primer Gobierno de Euzkadi, siendo Agirre su Lehendakari.
En lo que respecta al ayuntamiento de Abadiño, el 12 de diciembre de 1936, juraba su cargo como alcalde de la localidad el jeltzale Sotero Badaya Iturrizaga. Antes de que jurara su cargo, siguiendo la orden gubernativa recibida, fueron cesados el anterior alcalde y varios concejales sospechosos de no colaborar con la República.
En aquel tiempo en el que el Lehendakari Agirre y el alcalde Badaya juraban sus cargos, las bombas caían a escasos kilómetros de Abadiño, caían en la línea Intxorta – Kanpazar, donde se libraban cruentas batallas entre ambos bandos.

053-114

Gudaris de Abadiño.

Los jeltzales abadiñarras, especialmente los más jóvenes, pasaron a formar parte de los distintos batallones constituídos por orden de EAJ-PNV, y acudieron así al frente de batalla en defensa de la libertad. Otros muchos, formaron parte del Comité Local de Defensa también por orden del partido. Éstos se encargaban de mantener el orden público en las calles abadiñarras dentro del ambiente bélico que se respiraba. Desde finales del año 1936 hasta mediados de 1937 Abadiño se convirtió en un sitio de tránsito de batallones de distinta ideología. En Elorrio, a los pies del Intxorta, donde se mantenían cruentas batallas entre ambos bandos, se establecía una de las bases del Euzko Gudarostea (Ejército Vasco).
En esas fechas, cuando todavía las tropas franquistas no habían ocupado Abadiño, el Comité Local de Defensa hizo lo posible por establecer el orden público en el municipio. Familias carlistas leales a la sublevación militar fueron protegidas por los jeltzales locales, debido principalmente a que había grupos incontrolados que querían hacer la justicia por su cuenta con estas personas tradicionalistas. En ese sentido, el Comité Local de Defensa cumplió la orden recibida del partido lo mejor que pudo. Aun así, a éste Comité le fue imposible evitar el asesinato del joven de 17 años Hipólito Salterain Gastelurrutia por un grupo de estos incontrolados en Astola, justo antes de entrar las tropas franquistas al municipio abadiñarra.
Al caer primero Elorrio y más tarde Abadiño en manos de los franquistas, muchos jeltzales abadiñarras que todavía seguían vivos fueron detenidos o forzados a salir al exilio. Otros, padecieron como jamás hubieran podido imaginar, penurias, vejaciones e incautación de bienes. Nada más entrar en Abadiño las tropas franquistas de Mola, saquearon el Batzoki e hicieron una gran fogata en frente, quemando así gran parte del material que había dentro. Varios papeles de la organización municipal de EAJ-PNV fueron incautados por los militares franquistas. La documentación incautada el año 1937 en el Batzoki abadiñarra, fue recientemente (2011) entregada a su propietario legítimo, EAJ-PNV, y está guardada en el archivo que tiene el nacionalismo vasco en Bilbao, en Sabino Arana Fundazioa. Todos esos papeles incautados por la fuerza en su día a los jeltzales, son conocidos como los papeles de Salamanca. Este material les sirvió a los franquistas para perseguir, juzgar y reprimir aun más a los jeltzales durante la dictadura.

| POSTGUERRA, CLANDESTINIDAD Y RESISTENCIA (1939-1977) | Los que habían estado de concejales en el ayuntamiento o en la junta municipal de EAJ-PNV sufrieron todo tipo de penurias y calamidades una vez ocupado el municipio por los golpistas. A continuación unos ejemplos: El jeltzale Sotero Badaya, que estaba de alcalde cuando fue ocupado Abadiño por los militares franquistas, la Guardia Civil le detuvo en la casa de “Solozabal” el 14 de julio de 1937. En octubre del mismo año lo ingresaron en la prisión central de Iruña, en el Fuerte de San Cristobal. Permaneció preso en el Fuerte de San Cristobal cuatro años y medio en unas condiciones inhumanas. Muchos presos murieron en este fuerte construído por orden de Alfonso XII. Muchos fueron fusilados, muertos por desnutrición y tuberculósis. El 22 de mayo del año 1938, hubo una gran fuga en el Fuerte de San Cristobal promovida por los presos comunes y muchos presos políticos y sindicales, entre ellos el alcalde abadiñarra, fueron obligados a salir del Fuerte. En total, fueron más de 200 asesinados durante la captura de los fugados y se conoce como la fuga más sangrienta de Europa. Nuestro protagonista, en esta fuga, pudo llegar al Fuerte de San Cristobal con varios compatriotas y salir del mismo sitio con vida milagrosamente años más tarde. Tuvo que pasar por otras 8 cárceles más antes de regresar a su casa.

El jeltzale Pedro Astigarraga pasó unos meses en Bermeo antes de regresar a Abadiño. Francisco Iturriagagoitia, “Patxi Lebario” que llevaba de concejal varios años, estuvo desterrado en Galicia. El abadiñarra  Federico Iturriagaetxebarria, que fue profesor en la ikastola de Elorrio, tras la Guerra Civil y con 29 años, fue condenado a 30 años y un día de cárcel en la prisión de El Dueso. En esa época también estaban de concejales de EAJ-PNV:Marcelo Munitxa, Mauricio Zubero, Pedro Manuel Olea e Hipolito Ardanza. A excepción de Munitxa y Olea, el resto pasaron por la cárcel. Zubero en la cárcel de Puerto de Santa María y Ardanza en Bilbao. Éste último estuvo varios días sin esperanzas de vida debido a una enfermedad que padeció en la cárcel, pero al final, se recuperó y sobrevivió.
Una vez que los golpistas se hicieron con el poder en el territorio vizcaíno, varias familias tradicionalistas que fueron defendidas por jeltzales desde el Comité Local de Defensa durante la guerra en Euskadi, Denunciaron a personas que anteriormente les habían defendido de los grupos de incontrolados que querían hacer la justicia por su cuenta. Por lo normal, el trámite que padecieron muchos jeltzales locales fue el siguiente: una vez hecha la denuncia, los denunciados eran detenidos. Ya en la cárcel, les hacía falta informes favorables de la iglesia, del ayuntamiento y de la Guardia Civil, (todos ellos afines a los golpistas), para rebajarles la condena o tomarlas en consideración. Cuando los franquistas consideraban que ya tenían la documentación necesaria, les hacían una farsa de juicio en la plaza pública y tras una breve declaración de los acusados les condenaban. Las condenas más habituales eran las de “12 años y un día de reclusión temporal, y legales, como autor de un delito de auxilio a la rebelión sin circunstancias…” “30 años de reclusión y accesorios legales como autor de un delito de rebelión militar, sin circunstancias.” “Nacionalista exaltado” “Condena a muerte” A muchos que estaban presos y no tenían sentencia, por la mañana les sacaban de las celdas y los fusilaban directamente.

Hubo traiciones de personas que conocían la información del ayuntamiento por trabajar en ella (años de la República) y la utilizaron para castigar aun más a los jeltzales. Pasados unos años, todavía en época franquista, algunas de estas personas que utilizaron la denuncia y la traición para beneficio propio, se arrepintieron y pidieron perdón a las mismas personas o familias que les denunciaron y les traicionaron años atrás. El daño ya estaba hecho, pero fueron gestos que se produjeron en el municipio y ayudaron a rebajar la tensión. Otros en cambio, nunca lo hicieron. La lista de heridos, detenidos, fallecidos y desaparecidos a consecuencia de la guerra fue demasiado larga. Pese a las adversidades, amenazas, vejaciones y penurias que tuvieron que sufrir, los jeltzales locales persistieron en la defensa de su ideario nacionalista y a partir del año 1945, se reestructuraron en la resistencia: reparto de publicaciones clandestinas, pintadas, colocación de ikurriñas…

| POSTFRANQUISMO. AÑOS 80. UNA NUEVA REALIDAD | Tras la muerte del dictador Franco, los jeltzales abadiñarras procedieron a abrir la afiliación y constituir la organización municipal. En marzo de 1977, una vez que EAJ-PNV se inscribiera en el Registro de Asociaciones Políticas, fue legalizada. El partido no disponía de dinero ni bienes, estaba en quiebra, pero los jeltzales tenían muchas ganas de hacer bien las cosas y de sacar adelante el pueblo. Hubo personas que trabajaron con ahínco en el resurgir del partido y tanto humanamente como económicamente hicieron un gran esfuerzo. El objetivo era la de abrir una sede social en condiciones y empezar a andar de nuevo en la legalidad. En el año 1979, en las elecciones municipales celebradas, la lista más votada fue la de EAJ-PNV, encabezada por Jose Luis Lasuen Berrizbeitia. Al de un tiempo, éste dejó el cargo y en su lugar, entró de alcalde el también jeltzale Luis Irazola Arrinda. En esa época, el Batzoki tenía su sede en el caserío Zubiondo, que es el caserío que está justo antes de llegar al ayuntamiento a mano izquierda.

Unos años más tarde, a principios de los años 80, el Batzoki se trasladó al sitio que permanece en la actualidad, a la calle Ferialeku número 3. A la inauguración del nuevo Batzoki, les acompaño a los jeltzales locales el vicelehendakari del Gobierno Vasco Mario Fernández. Tampoco faltaron a la cita los elorrianos Pujana, Agirre y un numeroso público de la localidad. Esos inicios en el nuevo Batzoki estuvieron marcados por una nueva realidad. Eran años duros en cuanto a la barbarie que estaba cometiendo ETA. Si 40 años atrás, los jeltzales recibían amenazas, seguimientos y encarcelamientos por la dictadura franquista, en estos inicios de los años 80, era ETA la que les amenazaba, mandaba cartas de extorsión y les perseguía a estas mismas personas.

Batzoki 4

Inauguración del batzoki actual en el Ferialeku en los años 80.

Era una nueva triste realidad para estos jeltzales históricos abadiñarras.. Desgraciadamente, esta amenaza ha durado hasta hace bien poco tiempo. En cuanto a la corporación municipal,después de los 4 años de gobierno municipal de Luis Irazola, le sustituyó en el cargo el jeltzale Carmelo Larrauri Galarza. En 1987, después de la fractura vivida en 1986 con el nacimiento de EA, el jeltzale Javier Uriarte Barinaga pasó a ser el nuevo alcalde del municipio. Éste, se mantuvo como máximo representante del ayuntamiento durante 20 años. En la actualidad, sin la amenaza de la violencia y con todas las sensibilidades políticas en las
instituciones, los jeltzales locales siguen defendiendo los ideales legítimos y democráticos de EAJPNV. Siempre trabajando por y para el pueblo.

Batzoki 6

Algunas personas que participaron en los actos del 110º aniversario del batzoki de Abadiño.

Fuentes consultadas por el autor:
‘Ehun urte eta…osasuntsu. Abertzaletasuna Durangon. Historia del nacionalismo’, de Román Berriozabal Azpitarte.
‘Nacionalismo vasco en Elorrio 1894-1937’, de Román Berriozabal Azpitarte.
Testimonios de jeltzales locales. 

Ayúdanos a crecer en cultura difundiendo esta idea.

Bilatu